Las pastillas de freno antiguas no eran mejores
Desde la experiencia y conocimiento del profesional de la reparación, en ocasiones afirmamos que las pastillas de freno de tiempos anteriores eran superiores en prestaciones a las actuales, pero nada más lejos de esa afirmación.
El desarrollo de la industria del automóvil ha provocado que los vehículos cada vez sean más eficaces y veloces, lo cual necesita de unos niveles prestacionales de seguridad activa superiores en la frenada, que en el pasado no eran necesarios al ser vehículos con sistemas de frenado distintos, velocidades inferiores y pesos de otra dimensión. Además de carreteras en peor estado lo que limitaba aun más la velocidad.
Las formulaciones de las pastillas de freno, antaño, se realizaban básicamente con una materia prima específica denominada amianto. Este producto se prohibió al inicio de los 90´, ya que por sus características, podía generar una enfermedad denominada asbestosis con resultados fatales.
La evolución de las pastillas de freno y del material de fricción en general llevó a los fabricantes a trabajar con fibras alternativas al amianto para aportar los niveles tecnológicos necesarios para la detención del vehículo.
La evolución de las formulaciones es necesaria ya no solo por aspectos de prestaciones técnicas, sino también por que los materiales deben estar en sintonía con el medioambiente, produciendo materiales más limpios y seguros y, sobre todo, sostenibles.
Para ello, Federal Mogul y sus marcas de fricción se preparan hoy para los retos del mañana, donde las legislaciones limitarán la producción de materiales fricción con cobre (2025), alto contaminante medioambiental, y que en la actualidad ya se utilizan como formulaciones modernas y revolucionarias denominadas materiales ECO friction y ya instaladas en OE, como también ya disponibles en el mercado de reposición de la mano de Ferodo.
El objetivo de unas pastillas de freno es transformar la energía cinética generada por el vehículo en movimiento en temperatura que, por el efecto de la fricción, produce la detención del vehículo.
En la actualidad, la exigencia de eficacia, confort y duración de las pastillas de freno es extremadamente superior a las pastillas con tecnologías antiguas, ya que los vehículos son muy distintos.
En el hipotético caso de que utilizásemos una pastilla de freno de las que hemos descrito, un vehículo actual no sería capaz de detenerse en los metros previstos, dentro de las exigencias de seguridad. En consecuencia, las pastillas de freno de tecnologías antiguas no son mejores.
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