El recambio, entre la incertidumbre y el escenario inflacionista, por José Luis Bravo (Ancera)
La distribución de recambios ha recuperado la actividad perdida y a finales de 2021 superaba ya el 4% la actividad que registró en 2019. Las previsiones de crecimiento son del 5% para 2022, pero preocupa la espiral inflacionista, la incertidumbre, la caída de las matriculaciones o la conectividad.
La gratitud debería ser un acto constante y es por eso que quisiera comenzar este artículo agradeciendo a Infotaller, en nombre de Ancera, la oportunidad que nos da, un año más, de poder colaborar con la Ruta del Recambio y exponer brevemente una reflexión sobre la situación actual del sector en España.
La distribución de recambios ha recuperado en los últimos meses la actividad perdida, superando incluso el 4% la actividad que registró en 2019, hacia finales del año 2021. A día de hoy, nos encontramos con un incremento en torno al 10%, respecto del mismo periodo de 2021. Nuestro sector manifiesta perspectivas de crecimiento para fin de año aunque, eso sí, más moderadas, en torno al 5%.
Debemos tener presente siempre la previsión de crecimiento de la economía a nivel general. Las cifras de este ejercicio revelan una moderación a medida que pasan los meses. Hablamos de una progresión del 5% aproximadamente. Además, con previsión de una inflación para este año entre el 6-8%. Por tanto, el crecimiento a nivel de rentabilidad para nuestras empresas será más comedido, debido principalmente al escenario inflacionista.
La mayor de nuestras preocupaciones a corto plazo es la incertidumbre de nuestro entorno, a nivel político y económico.
También nos preocupa la disminución continuada de las matriculaciones, puesto que son los vehículos a los que tendremos que dar servicio en unos años. Hoy el parque continúa en aumento, pero también su edad media, por lo que necesitamos alentar la renovación del parque circulante. Un vehículo antiguo nos da menor rentabilidad e inversión y el kilometraje realizado por el usuario final es menor.
Otro escenario que nos afecta es el legal. El vehículo conectado pondrá en riesgo 7 de 10 operaciones de posventa. Por ejemplo, al brindar la posibilidad de realizar diagnósticos o reparaciones remotas, entre otros. Asimismo, el reglamento 461/2010 dejará de estar vigente en unos meses y necesitamos una norma que proteja nuestra competitividad y se adelante a posibles tendencias futuras de la posventa, además de mejorar la supervisión del cumplimiento.
El automóvil avanza en términos de tecnología y sostenibilidad. Estamos trabajando para que el futuro del automóvil sea una oportunidad y no una amenaza para el comercio de recambios. Hoy en día, tendencias como el vehículo eléctrico, compartido o incluso las operaciones de renting, no tienen un impacto significativo en la posventa. Pero no sabemos si lo tendrá en unos años. Es por esto que el sector en conjunto debe enfocarse y trabajar en generar oportunidades de negocio para la posventa multimarca, servicios innovadores y creación de valor en lo que se refiere a la movilidad sostenible y conectada.
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