Un incendio intencionado en un concesionario de Tesla en Fráncfort, Alemania, ha resultado con hasta 15 Tesla Model Y afectados. Diez de ellos quedaron calcinados, mientras que otros cinco fueron seriamente dañados.
El acto de vandalismo fue llevado a cabo por un grupo de activistas radicales en contra de Tesla, quienes han asumido la autoría del incendio a través de una carta anónima en internet.
Rápidamente, los bomberos se movilizaron para controlar la situación, pero el fuego ya se había propagado por el concesionario. Fueron necesarios 40 efectivos y cinco camiones del cuerpo de bomberos para extinguir las llamas. Aunque no hubo daños personales, las pérdidas se estiman en más de 500.000 euros.
Protestas en torno a la transición ecológica
Este acto ha generado un debate sobre las protestas climáticas y la transición hacia los vehículos eléctricos. Mientras algunos ven la necesidad de un cambio rápido hacia alternativas de movilidad más sostenibles, otros creen que este cambio se está produciendo a expensas de la justicia social y el medioambiente.
En la carta, titulada 'Teslas flambé', los autores expresaron su descontento con la respuesta global al cambio climático. Tacharon a Tesla como su "máximo enemigo" y argumentaron que Tesla representa la "ideología del capitalismo verde". Acusan a la industria automotriz de ser responsable de la destrucción global y colonial, sobre todo por la extracción de minerales como el cobalto y el litio en condiciones precarias en Latinoamérica y África.
"Presentar los coches eléctricos como una alternativa respetuosa con el clima es una mentira cínica debido al origen de sus componentes como el cobalto y el litio necesarios para las baterías, que se extraen en condiciones terribles en Latinoamérica y África”, resaltan.