¿Qué es un pigmento metalizado y cuál es su estructura?

A través de los años, los distintos colores en los vehículos han ido modificando su tendencia, aumentando la elección de los colores metalizados. Esta variación se dio desde los años 80. Aquí entran los hábitos de consumo, el mercado de pigmentos en expansión y el control de calidad en el proceso.

En un webinar organizada por Roberlo, David Serrano, director de la tecnología del color de Roberlo, y Jéssica Rodríguez, técnica de colores de Roberlo, explicaron las diversas características de esta tipología del color, además de señalar cuáles eran sus componentes principales y otras cuestiones de colorimetría.

Un pigmento metalizado es aquel que refleja la luz, natural o artificial, aportando brillo gracias a sus partículas brillantes. Las pinturas con este tipo de pigmentos constan, señala Jessica Rodríguez, de “resinas, aquello que da la estructura a la pintura (bicapas) y aportan flexibilidad y adherencia; disolventes que dotan de la viscosidad adecuada para su aplicación y disposición, ceras, estabilizantes, o láminas de aluminio para ofrecer un extra de resistencia y pigmentos”. En estos colores metalizados prevalecen los pigmentos transparentes, ya que favorecen el paso de la luz de forma más fácil.

Existen algunas propiedades de las partículas de los pigmentos metalizados que son útiles de conocer, según afirma David Serrano: El brillo, la sensación de textura, el flop y la limpieza aumentan con el tamaño de la partícula, mientras que el poder cubriente disminuye con el tamaño de esta. Estos colores ayudan a “ganar dinamismo visual resaltando así los cambios de plano en las superficies del coche”, explica. En estos colores metalizados prevalecen los pigmentos transparentes, ya que favorecen el paso de la luz de forma más fácil.

DIFICULTADES

“El mercado sólo acepta colores nuevos si realmente marcan alguna diferencia”, señala Serrano. Además, estos colores presentan otras dificultades, como, por ejemplo, la variación según el ámbito de visión.

“El coche puede estar repintado, tener muchos años, etc. Estas variantes puedes jugar a nuestro favor. Con una buena difuminación se puede hacer una buena integración del color”, recuerda Rodríguez.

Para aplicar de forma adecuada estas pinturas, hay que prestar atención al proceso de igualación, ya que estos colores pueden cambiar de apariencia como consecuencia de distintos factores. Así, por ejemplo, la tonalidad del color del fabricante de pintura puede que no concuerde totalmente con la original del coche. Por lo que se debe modificar el color o recurrir a técnicas de difuminado.