Cómo afrontar la reparación de un paragolpes
Determinar el alcance del daño será clave para determinar como proceder.
La reparación de un paragolpes es uno de los trabajos más habituales de un taller. Actualmente, son elementos que, además de ofrecer protección frontal, cumplen una función estética, por lo que en la mayor parte de los casos están integrados en la carrocería.
Se trata de la primera línea de defensa del vehículo ante cualquier impacto, por lo que es normal que sea una de las piezas que más se repara. Antes de proceder a la reparación, desde el blog de Loctite Teroson recomiendan analizar la zona afectada para comprobar qué piezas se pueden reutilizar y cuál es el alcance de la fractura.
Las roturas se pueden dar tanto en la pieza como en el vehículo. A la hora de comenzar la reparación, lo principal será desmontar aquellos elementos que entorpezcan la reparación, como faros, guardabarros o las propias ruedas. Si el parachoques solo se ha descolgado, sin romperse ninguna pieza o anclaje únicamente habrá que volver a fijar la pieza al coche con los agarres necesarios.
En el caso de que los anclajes se haya partido, si es en el propio paragolpes se puede volver a pedir uno nuevo. Sin embargo, si es en el vehículo lo más probable es que haya que hacerlos de nuevo, por lo que será preciso utilizar un taladro para crear un nuevo alojamiento del tornillo.
Novedades destacadas
También te puede interesar