Adhesivo estructural: qué es y cómo se aplica

Un adhesivo estructural es un producto para la unión de piezas que ofrece altos niveles de resistencia. Según explica Loctite en un post de su blog, estos productos ofrecen una alta fijación y están destinados a unir piezas y elementos complejos, para aportar una fijación duradera y mantener el buen estado de elementos estructurales básicos para el vehículo.

El post destaca que, dada su complejidad, cualquier error en la preparación del soporte o en la aplicación del adhesivo conllevaría la pérdida de resistencia de la unión. Este tipo de adhesivos tiene una gran capacidad para unir metales, tanto tratados como en bruto; no necesitan imprimación y ofrecen protección anticorrosiva para las zonas soldadas o remachadas. Por ello, están especialmente indicados para complementar la fijación de techos, paneles laterales, refuerzos y faldones traseros.

PASOS PARA APLICARLOS

Materiales necesarios: pistola de aplicación de producto, espátula, pincel, limpiador y un trapo.

1. Preparar la zona que se va a trabajar, que debe estar libre de grasa, polvo o suciedad. Para limpiar la zona, el post recomienda utilizar un limpiador específico como Teroson VR 20.
2. Aunque no es obligatorio lijar las piezas que se van a unir, sí es recomendable para mejorar la adhesión. Es especialmente importante en aluminio y en sustratos pintados. En caso de lijar, también habrá que repetir el proceso de limpieza.
3. Aplicar el adhesivo estructural una vez que la zona está seca. Para ello, se enrosca en el orificio del cartucho su boquilla estática de mezcla y se aplica el producto con la pistola. La capa de adhesivo ha de ser fina, entre 0,1-0,2 mm. También se puede hacer uso de una espátula para extender el adhesivo.
4. Ensamblar las piezas. Debe prestarse especial atención para que queden bien alineadas.
5. Fijar las piezas y retirar el producto que haya rebosado. Es importante extremar la precaución para evitar que se manchen los alrededores de la pieza o el tapizado que pueda.
6. Curado. Existen dos maneras principales: a temperatura ambiente (3 días de tiempo medio, pero las piezas ya presentan resistencia funcional a las 6 horas) o con calor, por medio de una estufa de rayos IR. En el segundo caso los tiempos puede ser o bien de 60 minutos para una temperatura superficial de los sustratos de 60ºC o de 30 minutos para una temperatura de 100ºC.