Las visitas al taller caen el 50% en siete años en Cáceres por los ilegales

Es una lacra y aunque las asociaciones de talleres de todo el país no paran de realizar denuncias a las inspecciones de Trabajo, Industria y Medioambiente, la actividad de los ilegales sigue creciendo.

Así lo ha puesto de manifiesto la asociación de talleres de Cáceres, que asegura que en la provincia existen “auténticos negocios en la sombra” que operan en garajes privados o en locales clandestinos.

"Sabemos que existen estas prácticas y las venimos denunciando. Siempre las ha habido, pero han aumentado con la crisis", explica Valentín Liberal, presidente de la ATC (Asociación de Talleres de Reparación de Automoción de Cáceres) a El Periódico de Extremadura.

De hecho, según la patronal cacereña, la crisis y la proliferación de los ilegales han disminuido las visitas al taller legal el 50% en la provincia en los últimos siete años.

Al daño que los ilegales causan al sector y a los profesionales que operan legalmente hay que sumar la competencia desleal que suponen. “Los talleres que trabajamos dentro de la normativa no podemos ahorrarnos ciertos márgenes ni jugar con ellos”, asegura Liberal.

“Entendemos la situación de quienes se quedan en el paro, pero en el momento en que mantienen una actividad de este tipo deben darla de alta”, explica Elías Denche, profesional veterano de la ciudad extremeña.

Y es que, un taller ilegal no paga impuestos, ni tasas, ni cumplen con la Ley de prevención de riesgos laborales, ni acatan la normativa de los trabajadores.

Tampoco ofrecen garantía de su trabajo “y el usuario tampoco se plantea qué sucedería si se produce una desgracia con su coche en el taller”, afirma Pedro Rosado, secretario de la federación empresarial de Cáceres (FEC).

Desde la FEC, donde está integrada la ATC, destacan, además, que “no solo se trata de saltarse la ley, de crear competencia desleal o de cometer fraude al a Seguridad Social; también dañan el medioambiente. Estos talleres trabajan con aceites, disolventes, baterías y otros productos muy contaminantes” para los que no tienen un programa de gestión de residuos adecuado.