No corren buenos tiempos para los fabricantes de neumáticos. Muestra de ello es la decisión de Bridgestone Hispania Manufacturing de iniciar un procedimiento de despido colectivo en dos de sus tres plantas españolas, la de Puente San Miguel (Cantabria) y Basauri (País Vasco). El motivo, esgrime el fabricante norteamericano, responde "a los profundos cambios que están teniendo lugar en el mercado europeo del neumático y a la necesidad de adaptar la estructura productiva de la compañía". En tota, afectaría a 546 trabajadores, de los que 335 corresponden a Basauri, con una plantilla total de 831 operarios, mientras en Puente San Miguel se verían afectados 211 de sus 418 trabajadores, según han confirmado a Europa Press fuentes sindicales.
"Los sectores de neumáticos radiales agrícolas (AGR) y de camión y autobús (TBR) han experimentado una contracción significativa debido a un entorno macroeconómico desafiante, marcado por la inflación, la incertidumbre y cambios regulatorios. Además, el auge de fabricantes no europeos, que han ido ganando cuota de mercado de manera progresiva, ha intensificado la presión competitiva. La compleja situación del mercado, junto con estos cambios estructurales, hacen necesario un ajuste de la capacidad productiva para poder competir en un entorno cada vez más exigente y alinearse con la nueva realidad del mercado", argumentan Bridgestone en su comunicado remitido a los representantes de los trabajadores.
Bridgestone reafirma, añade el comunicado, "su compromiso con un proceso de diálogo abierto y transparente, siendo plenamente consciente de la incertidumbre y el impacto que este proceso puede generar en los empleados. La compañía está llevando a cabo este procedimiento de la manera más responsable y respetuosa posible con su plantilla, en colaboración con los representantes de los trabajadores y en línea con sus valores de integridad y responsabilidad social", concluye.
Convocatoria de huelga en las dos plantas
Las secciones sindicales de Bridgestone Hispania (CCOO, UGT, SITB, ELA y BUB) han anunciado que interpondrán solicitud de huelga en los centros de Basauri y de Puente San Miguel en Cantabria, ya que a su juicio, la medida es "inaceptable e injustificada" y "un ataque frontal a toda la plantilla", al que responderán "con contundencia".
En un comunicado conjunto, los sindicatos han calificado esta decisión como una "aberración" y han acusado a la dirección de la empresa de "incompetente". A su juicio, es "inaceptable" que se responsabilice a los centros de trabajo de Bridgestone Hispania de los problemas productivos europeos, cuando son los centros que han soportado "los ajustes de producción con ajustes salariales, quedando con escasa o nula afectación en el resto de los centros de trabajo de Bridgestone a nivel de Europa".
Según han indicado, es "llamativa" la rapidez del análisis de los sectores de camión y autobús (TBR) y agrícola (AG), lo que hace evidente que ha sido "una decisión premeditada". En su opinión, la dirección de la empresa "ha transgredido la buena fe" y por tanto "ha faltado al respeto a la representación legal de los trabajadores, y a toda la plantilla". "La medida planteada es injustificada, inmoral, inaceptable y desproporcionada, y denunciamos la total indiferencia de la dirección hacia el impacto humano y social de la misma", han añadido.
"UN CIERRE A FUTURO"
Además, han asegurado que esta decisión genera "una enorme incertidumbre" sobre el futuro de los centros de trabajo de Basauri y Puente San Miguel, "ya que prácticamente supone un cierre a futuro". Las citadas secciones sindicales han asegurado que es "completamente intolerable" que los responsables de ambas fábricas hayan aceptado "ese discurso impuesto desde las altas esferas de la compañía, colaborando en el desmantelamiento de las fábricas en Bridgestone Hispania". "Esto ocurre a pesar de todos los sacrificios hechos por la plantilla, que aún mantenía la falsa esperanza de una apuesta por el futuro, promesa que hoy se desmorona", han añadido.
Ante esta situación, han exigido soluciones "efectivas, solidarias y respetuosas", en lugar de la vía "traumática y destructiva" elegida por una empresa con "enormes beneficios". Los sindicatos han señalado que el anuncio del ERE y las formas de actuar de la empresa son "un ataque frontal a toda la plantilla, sin distinguir colectivo, departamento o planta", por lo que procederán a tomar "medidas de la misma contundencia".
"Es una agresión a todos y cada uno de los 2.800 trabajadores de Bridgestone Hispania Manufacturing. No caigamos en el juego de la empresa del 'divide y vencerás'", han señalado. Por ello, han comunicado que, en primera instancia, van a proceder a interponer solicitud de huelga para los centros de trabajo afectados, informa Europa Press.