Cómo descarbonizar un motor con gas orto-oxihidrógeno
El proceso es aplicable a cualquier tipo de motor de combustión: gasolina, diesel, GLP...
Los residuos generados en la combustión y por los sistemas de recirculación de gases forman una especie de costra de carbonilla que obstruye los conductos del motor. Esto eleva el consumo, las emisiones y el desgaste del propulsor, al tiempo que reduce el rendimiento del vehículo.
Por ello, cada vez más talleres ofrecen servicios de descarbonización de motores. Hasta hace unos años los métodos disponibles eran muy complejos, costosos y algunos muy contaminantes. Actualmente, hay máquinas que permiten hacer una limpieza profunda del motor en menos de una hora.
Según nos explican desde la empresa viguesa Descarboniza-t, dedicada exclusivamente a la descarbonización de vehículos, el proceso consiste en acoplar al vehículo una máquina descarbonizadora que introduce gas orto-oxihidrógeno por la admisión. El proceso, aplicable a cualquier tipo de motor ya sea gasolina, diesel, GLP, etcétera, pasaría por diferentes fases:
- El gas generado por la maquina se introduce por la admisión, mezclándose con el aire aspirado a través del filtro.
- A su paso por los tubos y piezas que están antes de la cámara de combustión, no tendrá ningún efecto, ni positivo ni negativo. Su eficacia comienza al ser combustionado.
- Dentro de la cámara de combustión, el gas elevará la temperatura concentrando el calor hacia dentro, lo que hará que se quemen los residuos existentes en dicha cámara, incluyendo las válvulas, cabezas de inyectores, bujías, cabeza de pistón, etc. Los metales del motor no se calientan por efecto del orto-oxihidrógeno.
- Posteriormente, todo el calor generado junto con el vapor de agua pasa a formar los gases de escape, que descarbonizarán, por efecto de la temperatura, del vapor de agua y de la afinidad del gas orto-oxihidrogeno con el carbono, los conductos por donde vayan pasando: EGR, admisión, turbo, Fap y catalizador.
Las ventajas de la descarbonización del motor son obvias: el consumo del coche baja, al tiempo que se recupera potencia y par motor, se reducen las emisiones de humos... La máquina no puede dañar el motor, por lo que no hay riesgos. Incluso coches que no pasaban la ITV por niveles altos de gases, después de este proceso pasan la prueba de gases con resultados óptimos.
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