Paso atrás en el mercado de lubricantes: las ventas de 2022 fueron el 4,7% inferiores a las de 2018

Iba a ser el año de recuperación de los niveles prepandemia pero, finalmente, 2022 ha supuesto un paso atrás para el sector de los lubricantes de automoción. Sus ventas totales cayeron el pasado año un 2,6%, según ha comunicado Aselube en la presentación de su Memoria Anual. En total, se comercializaron 143.000 toneladas, 3.000 menos que en el año anterior.

La guerra en Ucrania, la escasez de materias primas y el fuerte incremento de los costes han provocado que el sector pierda fuelle tras un 2021 que supuso un incremento del 11,6%. En total, los miembros de la asociación vendieron 332.000 toneladas, de las que el 43,1% correspondieron a talleres, concesionarios y autocentros.

Y eso a pesar de la fortaleza de los vehículos ligeros. La reactivación del turismo, fundamentalmente, hizo que la venta de lubricantes en este segmento creciera un 1,3%. Sin embargo, la paralización de la industria, y por ende, de los vehículos pesados, ha provocado una caída que, este caso, alcanza el 3%. En total, 4,2 kilotoneladas menos de lubricante que en 2021.

Con estos datos, el sector de los lubricantes de automoción se encuentra todavía lejos de los niveles prepandemia y un 4,7% inferior a los niveles de 2018.

Caída generalizada

En cuanto al resto de segmentos, todos ellos experimentaron una caída de las ventas el pasado año aunque de menor envergadura. Los lubricantes para engranaje cayeron el 0,6% mientras que los de motocicletas lo hicieron en un 0,3%.

Por comunidades autónomas, Cataluña y Andalucía son las regiones con mayor cuota de mercado, ambas con un 14,1%.

"Año complicado"

La paralización de la industria afecta también a la venta de lubricantes que no son de automoción, que representan el 57% del total. España cerró el año 2022 con 332.000 toneladas de lubricantes puestos en el mercado. 6.000 menos que el año anterior, lo que se traduce en una contracción del -2% del mercado. Las únicas excepciones son la marina y la aviación, que presentan un crecimiento del 10,6% respecto a las cifras del año anterior.

José Luis Zuazola, presidente de Aselube, ha definido 2022 como un "año complicado". "La evolución de las materias primas, los elevadísimos costes y la falta de materias primas han hecho que sea un año difícil de gestionar en general para toda la industria, aunque hemos conseguido mantener el rumbo", ha defendido.

Por su parte, Gabriel López, presidente de la Comisión estadística ha adelantado que 2023 continúa con inestabilidad y volatilidad en los mercados, por lo que se antoja difícil predecir el futuro del sector. "2023 ha empezado mostrándonos que seguimos en ese carrusel. El primer semestre va a seguir siendo muy complicado y esperamos que para el segundo empecemos a encontrar la normalidad y las posiciones de los últimos años", ha concluido.