Los talleres suecos ponen en jaque a Tesla con la huelga más larga en 80 años

Son apenas 130 mecánicos, pero su persistencia ha puesto en jaque al gigante estadounidense Tesla. Los trabajadores suecos del fabricante llevan en huelga desde el pasado 27 de octubre. Su única petición es firmar un convenio colectivo, algo a lo que la firma de Elon Musk se niega en rotundo a pesar de las consecuencias los paros, los más largos de los últimos 80 años.

En total, 97 días de huelga y de boicot a la marca. 97 días sin que los mecánicos reparen sus vehículos, pero no solo. El bloqueo ha sido secundado y apoyado por diferentes sectores, desde la entrega de coches, el mantenimiento de la red de cargadores, la recogida de basura, la entrega de matrículas, la limpieza de los locales… etc.

En otras palabras, los estibadores no descargan sus coches. Los transportistas no los distribuyen. Los taxistas no los compran. Los electricistas no acuden a reparar sus puestos de carga, y así un largo boicot amparado por la solidaridad escandinava.

Las ventas se resienten

Sin embargo, Tesla está logrando sortear este bloqueo a través de nuevas contrataciones, aunque con fuertes retrasos. Sin embargo, la tendencia en las ventas, fruto directo o indirecto de la huelga, se está viendo afectada.

Algunos de sus modelos están llegando a Suecia en camión desde Alemania en lugar de hacerlo a los puertos más cercanos, lo que tiene un coste extra por la distancia. Las matrículas ya no llegan a sus oficinas, sino que Tesla ha pedido a sus clientes que las soliciten en su domicilio.

El Model Y de Tesla ha pasado de ser el coche más vendido en Suecia hasta octubre con mucha diferencia sobre el segundo a caer al tercer puesto desde entonces. Sin embargo, las cifras siguen siendo brillantes. En enero, se han entregado 749 unidades (593 Model Y, 145 unidades del Model 3) lo que supone un crecimiento del 231% respecto al mes de enero de 2023.

De momento, no hay síntomas de que Tesla vaya a abrirse a la firma del convenio colectivo, aunque la presión está en aumento. Los sindicatos de países como Noruega, Dinamarca y Finlandia se han sumado a un bloqueo que ponga contra las cuerdas a Elon Musk.