De trabajar de oído a depender del ordenador: así ha cambiado el oficio de mecánico

Julia Otero, en su programa Julia en la Onda de Onda Cero, ha aprovechado el espacio "Los Gremios" para dedicárselo a los mecánicos. En España, 1 de cada 5 ciudadanos no sabe cuándo le toca la próxima revisión y hasta antes de la pandemia, las familias gastaban más en bares y restaurantes que en el mantenimiento del vehículo que usan a diario

Celso Besoli, presidente del Gremio de Talleres de Barcelona, tiene 72 años pero dado de alta como jubilado activo, también ayuda en el día a día en el taller que actualmente regentan sus hijos, autotaller Proxim de Vilanova i la Geltrú. Besoli, que ha participado en este espacio radiofónico, empezó a trabajar con 14 años en la Renault como aprendiz. Además, hace un llamamiento para que se vuelva a instaurar la figura del "aprendiz de taller".

Por su parte, Francesc Gorjón, propietario del taller más antiguo de Sitges, ha recordado cómo era la mecánica hace algunos años. "Era más ruda y cuando se estropeaba un vehículo iban 4, 6 u 8 mecánicos para arreglarlo in situ y que pudiera seguir la marcha". También trabaja en un taller familiar y como curiosidad, se detuvo al "Vaquilla" delante de su taller.

La mecánica es una profesión vocacional

Jordi Vila, comenzó montando y desmontando el coche de su padre hasta que empezó a estudiar una formación profesional mientras trabajaba por la tarde en la Citroën. Ahora, es propietario de su taller, Vilamotorsport.

Lo cierto es que los tres testimonios han dejado claro que la mecánica es una profesión vocacional y que en la mayoría de las ocasiones es algo que se hereda de padres a hijos. Además, los tres profesionales son felices son su trabajo, algo fundamental para afrontar el día a día en el taller.

Esto es algo bastante complejo, a opinión de los tres propietarios de taller, ya que hay que enfrentarse a clientes, averías complicadas. También han manifestado que es fundamental reciclarse, formarse y evolucionar para adaptarse a las nuevas tecnologías del automóvil. Antes, "se trabajaba de oído" y ahora se utiliza el ordenador.

El vehículo enciende un testigo que, cuando se conecta con el ordenador, ofrece al mecánico información sobre las posibles causas de la avería pero es el mecánico formado el que podrá averiguar de qué se trata finalmente y no "cambiar piezas por cambiar".

Los tres mecánicos han pedido la regulación de la figura del aprendiz del taller y han solicitado que todo aquel mecánico, chapista o pintor que se haya formado y tenga experiencia que les haga llegar su currículum ya que el sector necesita "muchísimos profesionales".