La importancia de la protección auditiva en el taller
Hipoacusia, acúfenos y aumento del estrés, entre las enfermedades más típicas.
El taller de reparación es un entorno repleto de maquinaria con la que los trabajadores deben tener cuidado para no sufrir accidentes. La puesta en marcha de un Plan de Prevención de Riesgos Laborales es solo un paso para evitarlos. Entre los generadores de problemas de salud hay uno que suele pasar desapercibido, el exceso de ruido.
Por ley, en España es obligatorio utilizar protecciones auditivas en los talleres cuando el ruido supera los 85 decibelios continuamente, o a partir de 137 si son picos intermitentes, recuerdan desde el blog de Loctite.
Los talleres son zonas con un ruido constante y, normalmente, alto derivado de las diferentes máquinas y herramientas que se utilizan y algunos procesos que se llevan a cabo. Pruebas de motor, cabinas, sistemas de ventilación, trabajos en chapa. No utilizar las protecciones adecuadas puede derivar en enfermedades como la hipoacusia o pérdida de audición por una exposición prolongada. También son habituales los acúfenos que provocan una sensación constante de zumbidos en el oído.
Por otro lado, también destacan que la ausencia de protección sumada a la exposición a ruidos altos constantes genera un aumento de la presión sanguínea y de la frecuencia cardiaca, llegando a provocar síntomas como la irritabilidad, cansancio, nerviosismo, trastornos del sueño, estrés y disfonía (al tener que alzar la voz para comunicarse).
Novedades destacadas
También te puede interesar