Compraban coches y accedían a la financiación necesaria para ello con documentación falsa. Aunque el truco no es nuevo (ver noticia), le ha servido a una banda de 10 personas para estafar unos 200.000 euros a concesionarios. Eso sí, todos ellos han acabado detenidos y han sido recuperados cinco vehículos de alta gama.

La banda de estafadores estaba perfectamente jerarquizada: unos se dedicaban a falsificar documentación original robada a la que habían cambiado detalles como la firma o la fotografía, otros acudían haciéndose pasar por los compradores y titulares de dichos documentos y otros presentaban los papeles para que los coches adquiridos les fueran transferidos antes de la inscripción en el registro.

Algunas entidades financieras se dieron cuenta del fraude al contactar con los titulares de la documentación y comprobar que no tenían interés en adquirir ningún vehículo. Posteriormente, la Policía procedió a la detención de estas 10 personas.