Neumáticos en mal estado y la velocidad, principales causas de la muerte de Reyes
Comprobar la presión y el dibujo de la rueda son claves para la seguridad al volante.
El accidente ocurrido este pasado fin de semana en el que el futbolista José Antonio Reyes perdió la vida en un accidente de tráfico puso de manifiesto la importancia del mantenimiento para la seguridad vial. Según adelantó Mundo Deportivo, las primeras investigaciones de la Guardia Civil apuntan que las causas del accidente fueron el exceso de velocidad (circulaba a 237 kilómetros por hora) y el mal estado de los neumáticos.
Según apuntan desde el diario, hacía varios meses que el futbolista no conducía el vehículo con el que tuvo el accidente. Las primeras investigaciones apuntan que los neumáticos podrían no haber tenido la presión adecuada. Tras el reventón de una de las ruedas el futbolista perdió el control del vehículo, un Mercedes-Benz Brabus S550, y acabó colisionando contra unos bloques de obras.
Mantener los neumáticos en buen estado es clave para una conducción segura. Seguir las recomendaciones de los profesionales mecánicos, así como las de los fabricantes garantiza un menor consumo y un mayor agarre. Se trata de una lección que cobra una mayor importancia cuando el vehículo lleva parado cierto tiempo ya que el usuario no suele tener controlado el estado de algunos de los componentes. En estos casos es necesario realizar una comprobación previa de elementos como neumáticos, frenos, niveles de aceite o estado de los filtros.
Mantenimiento
Los neumáticos son uno de los componentes de los vehículos que más desgaste sufren al ser los primeros en estar en contacto con el asfalto. Comprobar la presión antes de cualquier viaje es primordial, ya que unas ruedas desinfladas, además de incrementar el consumo, aumentan la distancia de frenado.
También es importante comprobar el dibujo del neumático, ya que es un indicador del desgaste de la rueda. La profundidad mínima en España es de 1,6 milímetros, si es menor, además de ser ilegal, se pone en cuestión la integridad de la pieza que es más sensible a fallos y reventones. Por otra parte, si el desgaste se produce más en una parte que en otra, además habrá que acudir a los profesionales para realizar un equilibrado. Esta operación es recomendable hacerla cada seis meses.
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