Se necesitan dos partes al año para amortizar el seguro a todo riesgo

El 48% de los conductores que tienen seguro a todo riesgo sin franquicia o 'puro' afirman no haber tenido ningún siniestro en los últimos cinco años.

Teniendo en cuenta que el precio medio de este tipo de pólizas se situó en 2015 en los 1.146 €, son necesarios 2,12 partes al año para conseguir su amortización.

Es una de las conclusiones que se deprenden del último estudio realizado por Kelisto, que ha querido analizar cuánto se ahorra un conductor si contrata una póliza con o sin franquicia.

Según el informe, cada vehículo sufre una media de 0,4 siniestros al año, por lo que los propietarios que tienen contratadas coberturas a todo riesgo solo amortizan 141 €, lo que se traduce en que pierden 630 € anualmente.

Este dato explicaría por qué, desde el comienzo de la crisis, han aumentado los seguros con franquicia en detrimento de las primas a todo riesgo.

Para Celia Durán, responsable de contenidos de Seguros de Kelisto, “los datos muestran que los seguros a todo riesgo con franquicia son una opción interesante para ahorrar, ya que lo que pagan de más los conductores por un seguro sin franquicia, en realidad, no se compensa con el servicio prestado”.

Y es que la diferencia entre ambas opciones (con o sin franquicia) puede suponer un ahorro para el conductor de 744 € al año. Se entiende, por tanto, la reducción del número de automovilistas que circulan con coberturas a todo riesgo en los últimos años, algo que afecta directamente al volumen de operaciones en los talleres, especialmente a los de chapa y pintura, puesto que muchos golpes leves no se llegan a declarar ni, por tanto, a reparar.