Las aseguradoras facturan menos por las primas de auto

Las aseguradoras acaban de recibir una noticia agridulce. La facturación por primas de seguros de automóvil caerá por debajo de los 10.000 millones de euros al cierre de 2014, estimándose una caída de alrededor del 1,5%. Sin embargo, este retroceso es sensiblemente inferior al del 5,5% registrado en 2013, en comparación a un año antes, según el Informe Especial publicado recientemente por DBK, empresa española especializada en la elaboración de estudios de análisis sectorial y de la competencia.

Según DBK, la facturación por primas en seguros de auto se situó en 10.022 millones de euros en 2013, lo que supuso una caída del 5,5% respecto al ejercicio anterior, en el que el retroceso ya se cifró en el 5,9%. Sin embargo, aunque en el conjunto de 2014 la facturación por primas en el ramo del automóvil mantendrá todavía la tendencia a la baja de los últimos años, la caída se prevé menos marcada. Así, se estima que el valor del mercado disminuirá alrededor de un 1,5%, situándose por debajo de los 10.000 millones de euros. Por su parte, para 2015 la facturación por primas previsiblemente registrará una variación positiva.

Una lectura rápida de estos resultados viene a decir algo que el sector ya sabía. Por un lado, al caer las matriculaciones, se aseguran menos coches nuevos. Por otro, y debido al contexto económico actual, los conductores han reducido sus gastos en las primas de los seguros de sus vehículos, abandonando el 'a todo riesgo' por primas con menos coberturas pero también más baratas.

Todo esto viene a explicar el por qué de esta bajada de la facturación de las compañías de seguros, que en los últimos tiempos parecen apostar por las pólizas a todo riesgo con franquicia, según un reciente estudio del comparador de seguros acierto.com. En dicho informe se pone de manifiesto, a juicio de este portal, que las compañías quieren desincentivar la contratación de seguros sin franquicia en pro de las pólizas con franquicia.

Dado que los clientes tienen que asumir parte del coste de la reparación, éstos tienden a pensárselo dos veces antes de dar un parte de daños. Esto tiene una parte positiva para las compañías ya que supone una importante reducción de costes para las aseguradoras, pero como parte negativa influye en la mencionada caída de su facturación al ser primas más baratas. Todo este escenario ha influido como un factor importante más en la caída en la carga de trabajo de los talleres.