La posventa del renting: de la menor caída a la incertidumbre a medio plazo

Los servicios posventa cayeron el año pasado el 20% debido a la pandemia; si bien, los que atienden a vehículos de renting bajaron el 6,8%, mientras que los que se ocupan de particulares en talleres independientes y servicios oficiales lo hicieron en torno al 18%, asegura José Luis Gata, responsable de Mercado Posventa de Solera, en un artículo de opinión en la web de AER, la Asociación Española del Renting.

El mejor comportamiento de la posventa para vehículos de renting se debió, en opinión de Gata, a que estos vehículos hacen mucho más kilómetros, incluso en periodo de pandemia, por lo que tienen que acudir con mayor frecuencia a realizar sus mantenimientos. También porque los mantenimientos están incluidos en la cuota de renting y no se desdeñan.

Dado el carácter profesional del renting de vehículos, su posventa debería ser la primera en recuperarse, mientras que los talleres enfocados a particulares tardarán algo más en ver brotes verdes, porque en muy difícil que en 2022 recuperen los 5 años de negocio perdido a causa de la pandemia.

Incertidumbre

Por el contrario, la posventa del renting a medio plazo presenta cierta incertidumbre, debido a la ralentización en la renovación de contratos, pero podría compensarse con la creciente tendencia del renting de vehículos de ocasión o la extensión de los contratos existentes, lo que supone una oportunidad de tener un parque adulto mejor mantenido que cuando está en manos del particular en crisis económicas. De ser así, el taller vería incrementado su volumen de negocio en una franja de edad en la que las revisiones y mantenimientos se retrasan.

Para ello, el operador de renting deberá analizar con lupa los costes y contar con soluciones tecnológicas para ajustar al céntimo todas las variables. Recordemos que en torno al 10-15% de la cuota mensual de un contrato de renting corresponde a mantenimientos (tanto preventivos como correctivos) y reparaciones; es decir, unos 800 euros anuales, que durante los cuatro años de media que dura el contrato se situarán en más de 3.000 euros.