Un total de 15 meses de cárcel y una multa de 540 euros es la pena que deberá afrontar el propietario de un desguace ilegal con taller situado en el municipio de La Laguna (Santa Cruz de Tenerife).

A pesar de que el condenado no llegará a ingresar en prisión puesto que la pena no supera los dos años y carece de antecedentes penales, deberá recuperar el equilibrio ecológico perturbado mediante la ejecución de un plan de restauración del terreno donde desarrollaba su actividad.

Según la prensa local, el individuo había adquirido un terreno que después utilizó para depositar en él vehículos fuera de uso, así como para actividades de desguace y reparación de automóviles.

Además, extendió a terrenos de terceros y sin permiso estas actividades, las cuales desarrollaba sin ninguna autorización reglamentaria, al aire libre y sobre suelo rústico.

La Fiscalía le responsabiliza del vertido de residuos peligrosos que provocaron impregnación de lubricantes y combustible, entre otros tóxicos que se filtraban al subsuelo y que pudieron llegar a contaminar aguas subterráneas.