Circuitos de refrigeración y calefacción en eléctricos e híbridos: gestión térmica, funcionamiento y componentes

La nueva entrega de las Píldoras Formativas, resultado de la colaboración de EAATA e Infotaller, se aborda todo lo relacionado con los circuitos de refrigeración y calefacción existentes en los vehículos eléctricos e híbridos. Además, se explican los aspectos más relevantes de la gestión térmica y sus circuitos en los híbridos.

En esta lección, Manuel Guererro, técnico y formador de EAATA, explica en primer lugar que el circuito de refrigeración de un eléctrico es muy diferente al de un híbrido, debido a que el eléctrico no interviene en tantos componentes abonados al sistema de refrigeración. El circuito de refrigeración en los eléctricos, añade el experto, consta de un circuito de alto voltaje y de un circuito de calefacción del habitáculo. El líquido refrigerante de los vehículos eléctricos no tiene intervalos de mantenimiento y, en caso de rellenar el circuito, es fundamental seguir las instrucciones del fabricante.

El circuito de refrigeración de alto voltaje en los circuitos eléctricos gestiona la temperatura de trabajo de los componentes de alto voltaje, los cuales generan una gran cantidad de calor, especialmente en las etapas de carga y circulación eléctrica. Este circuito dispone de una bomba de agua eléctrica, ubicada normalmente en la parte trasera del módulo de propulsión eléctrica. Sus componentes principales son: el módulo electrónico de potencia y control, el cargador para baterías de alto voltaje y el módulo de propulsión eléctrica a corriente trifásica.

La unidad de control del motor regula la temperatura del circuito, que puede alcanzar hasta los 65º C aproximadamente. Esta acciona la bomba de agua eléctrica para forzar la refrigeración.

Por su parte, el circuito de calefacción del habitáculo en los coches eléctricos calienta el habitáculo cuando se solicita desde los mandos del climatizador. Los componentes principales son: la calefacción de alto voltaje tipo PTC, el intercambiador de calor de calefacción y la bomba para circulación de refrigerante. Esta segunda bomba, normalmente montada junto a la calefacción de alto voltaje PTC, es la encargada de forzar el paso del líquido refrigerante por el intercambiador de calor del habitáculo.

Los vehículos híbridos tienen numerosas particularidades a nivel de gestión térmica con respecto a los eléctricos. Los circuitos del líquido refrigerante y aire acondicionado trabajan de forma combinada para acondicionar la temperatura de servicio a través del habitáculo, el motor de combustión, el cambio automático y los componentes de alto voltaje. Los diferentes circuitos de refrigeración aportan el caudal volumétrico de líquido refrigerante óptimo para garantizar la seguridad funcional, un alto nivel de confort de climatización y un alto grado de rendimiento general.

Los híbridos de última generación se caracterizan por tener dos circuitos de refrigeración: el del motor de combustión y el especial para componentes de alto voltaje. Cada circuito tiene un depósito de expansión y un radiador propio