La utilidad de los aerosoles para retoques en el taller que evitan el repintado completo
Roberlo explica en su espacio formativo Crom Campus que este tipo de pintura se ha hecho un hueco de relevancia en el día a día de multitud de sectores, entre los que se encuentran los talleres de chapa y pintura. Su aplicación es mucho más sencilla que la pintura tradicional.
Desde Crom Campus el espacio formativo gratuito de repintado de automóviles y recubrimientos industriales de Roberlo, explican en una nueva entrada que la pintura en aerosol forma parte del mundo del repintado desde hace décadas. Durante todo este tiempo, su presencia dentro de la gama de pinturas de los fabricantes no ha hecho más que crecer, hasta el punto de que se han hecho un hueco de relevancia en el día a día de multitud de sectores.
El crecimiento al que se han visto expuestas se debe a las múltiples ventajas que ofrece respecto a ciertos productos tradicionales. Sin embargo, siguen siendo formatos con particularidades muy concretas que condicionan inevitablemente sus campos de aplicación.
Aliado perfecto
La pintura en aerosol es el aliado perfecto para realizar retoques y evitar el repintado completo debido a los múltiples beneficios de carácter general que ofrece este formato de pintura. Además, las pinturas en aerosol, suponen un complemento ideal en distintas fases de repintado de piezas que incrementa la productividad del trabajo realizado. Los principales beneficios que aporta son los siguientes:
Es un formato diseñado para incrementar la productividad en determinados momentos de la reparación o cuando resulta necesario efectuar retoques o el pintado de piezas pequeñas. Son pinturas listas al uso, lo que elimina la necesidad de efectuar procesos de mezcla tradicionales.
Su aplicación es sencilla y se efectúa directamente desde el propio bote que contiene la pintura, por lo que no es necesario ni utilizar y ni limpiar pistolas aerográficas de aplicación.
Calidades de pintura
Existen distintas calidades de pinturas en aerosol para adaptarse al tipo de trabajo a realizar. Dependiendo de la pintura en aerosol en cuestión, se comercializan los aerosoles tradicionales de un componente (1K), con propiedades mejoradas, y los de dos componentes (2K).
En el sector del automóvil, y como norma general, los de un componente son la formulación ideal para los aerosoles de pinturas de fondo y los de 2 componentes para las pinturas de acabado, ya que estos últimos muestran mejores propiedades químicas y mecánicas que los primeros. Ofrecen un secado más rápido, lo que contribuyen a reducir el tiempo de intervención y a postularse como la alternativa perfecta en determinados trabajos.
Campos de aplicación
La pintura en aerosol es especialmente útil en determinados procesos de preparación de fondos, retoques y repintados de urgencia o de poca envergadura. De forma más concreta, estos son algunos ejemplos característicos de usos típicos de estas pinturas en los talleres de carrocería y pintura:
- Limpiadores y productos de limpieza para descontaminar distintas superficies o piezas con geometrías complejas como llantas o pinzas de freno.
- Promotores de adherenciade 1K empleados para activar las superficies plásticas con el objetivo de incrementar la adherencia del soporte previo a la aplicación de aparejos o pinturas de acabado sobre estos sustratos.
- Aparejos de 1K utilizados para cubrir descubrimientos de masilla que aparecen tras el lijado del fondo 2k.
- Imprimaciones de protección anticorrosiva 1K destinadas a proteger superficies expuestas a los efectos de la oxidación y corrosión. Los productos más utilizados son los primeros anticorrosivos, como el Etch Primer 1K, que se aplican sobre la chapa desnuda; aerosoles de cinc, utilizados para revestir las caras internas de los metales soldados y las soldaduras efectuadas; la cera de cavidades, para proteger la cara interna y las piezas huecas de la carrocería; y los protectores de bajos y antigravillas, formulados especialmente para revestir el piso de la carrocería, los pases de rueda y la parte baja de estribos.
- Fondos para pinturas con efectos especiales necesarios para obtener una cubrición y unos efectos adecuados.
- Pinturas de acabado de uno y dos componentes para revestir, embellecer y proteger la superficie vista de las piezas. Dentro de este grupo encontramos tanto esmaltes como barnices para revestir piezas interiores o de menor tamaño de la carrocería y otros elementos como pinzas de frenos o llantas.
- Pinturas texturizadaspara cubrir plásticos negros o grises con acabado rugoso.
- Vinilos líquidosde un componente para pintar piezas con este tipo de acabado.
- Diluyentes de integración (fade out) empleados en las zonas de transición de los parches perdidos efectuados sobre paragolpes o montantes de la carrocería.
Cuando evitarlos
Desde un punto de vista genérico, el uso de aerosoles no es recomendable en las siguientes situaciones de trabajo:
- En el revestimiento de piezas y objetos de mayor envergadura.
- En trabajos que exigen la máxima calidadsuperficial, como ocurre con el repintado de turismos.
- En repintados de piezas y objetos que están expuestos a condiciones ambientales severas.
- En cualquier pieza susceptible de llegar a ser pulidaen algún momento, exceptuando los barnices en aerosoles 2k.
Cómo se usan
Antes de utilizar una pintura en aerosol es importante que se efectúe una valoración de la idoneidad de este formato para el trabajo que se va realizar, teniendo en cuenta los campos de aplicación mencionados anteriormente. A partir de aquí, las consideraciones que se deben tener en cuenta a la hora de utilizar una pintura en aerosol, son las siguientes:
- En formatos de aerosol de 2 componentes activar el mecanismoque permite la mezcla de los mismos.
- Agitar el bote durante unos dos minutosantes de iniciar la aplicación, a fin de que todos sus compuestos se mezclen correctamente en su interior.
- Hacer una prueba de pulverizaciónpara verificar que el atomizador se encuentra en buen estado.
- Aplicar el producto según las instrucciones del fabricante. Según el tipo de pintura que contenga el aerosol, la aplicación se realiza en una pasada, generalmente cuando se trata de pinturas de fondo, y en dos cuando son de acabado. En cualquier caso, suele efectuarse a unos 25 cm de distancia de la pieza, cruzando las pasadas en revestimientos de acabado y difuminando los finales de aplicación en pintados parciales.
- Tras finalizar la aplicación se debe invertir la posición del aerosol y pulsar el atomizador para descargar el producto contenido y, así, evitar que la boquilla se obstruya. En los aerosoles de dos componentes, no es necesario realizar esta acción, ya que, al producirse la mezcla de ambos, el contenido restante se secará inevitablemente.
Solución ideal para determinados trabajos
El proceso de repintado de un vehículo pasa por distintas fases de trabajo. Durante las mismas, se utilizan diversidad de productos, muchos de los cuales son de aplicación a pistola. Esto obliga a invertir un determinado tiempo de preparación y limpieza de los útiles de trabajo utilizados.
Sin embargo, la utilización de pinturas en aerosol para determinados trabajos, o su introducción en determinados momentos del proceso de repintado tradicional, permite incrementar la productividad sin que se produzca una pérdida de calidad, siendo, por lo tanto, la solución ideal para determinados tipos de trabajo.
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