La Policía Nacional investiga varios robos de catalizadores de coches estacionados en la vía pública en los municipios asturianos de Avilés y Oviedo, según recoge el digital El Comercio.

Los agentes sospechan que el implicado o los implicados deben poseer conocimientos mecánicos, pues al sustraer el catalizador no ocasionan desperfectos en el vehículo. La mayor parte de las piezas robadas tiene una estructura de cerámica y están fabricados en metales como el platino o el paladio, por lo que también se apunta a la posibilidad de que sean vendidos como recambios o metales posteriormente.

Un robo que se ha vuelto muy frecuente en la ciudad de Avilés, siendo la zona de El Nodo la protagonista de los últimos robos, que fueron al menos tres. Además, durante el mes de diciembre, la Ertzaintza alertó que en quince días habían recibido 58 denuncias al respecto, la mayoría en Vitoria, afectando a las marcas Citroën, Peugeot y Fiat. La reposición de esta pieza conlleva unos costes de entre 300 y 500 euros.