Lausan y Hella forman en diagnosis de eléctricos e híbridos en el primer webinar de 2021

Dentro del programa “Lausan contigo”, Ibai Martín, coordinador de redes de la empresa, presentó el pasado 3 de marzo el primer webinar de 2021 de dicho proyecto, titulado “Diagnosis del vehículo híbrido y eléctrico”. A su lado estuvo Julen Lardizabal, jefe de Ventas Nacional de Lausan, mientras que la formación corrió a cargo de Alex Jiménez, responsable técnico de Formación de Hella.

Alex, durante la hora de duración del webinar, comenzó explicando los tipos de vehículos electrificados existentes, que clasificó en microhíbridos de 12V, microhíbridos de 48V, Full Hybrid, híbridos enchufables Plug-in Hybrid y eléctricos. Los primeros son básicamente aquellos que montan sistema de arranque y parada automático Start&Stop y no disponen de sistema de regeneración de energía. Los segundos funcionan como un sistema kers, que transforman parte de la energía cinética en eléctrica y aportan potencia al tren de rodaje. En los terceros se combina un motor eléctrico y un térmico. Los más populares son los de Toyota. Los híbridos enchufables son una evolución de los anteriores y al disponer de autonomía eléctrica superior a 40 kilómetros reciben la etiqueta cero de la DGT, mientras que los últimos son los eléctricos puros, que utilizan para impulsarse exclusivamente un motor eléctrico.

Tras esta clasificación, Alex Jiménez entró más profundamente en los componentes del vehículo eléctrico: la batería de corriente continua, el motor y transmisión trifásicos, el conversor/inversor, que transforma la corriente continua en corriente alterna y los conectores de carga. El hándicap del vehículo eléctrico, señala Jiménez, está en la diagnosis, que a muchos da respeto y miedo.

A continuación explicó los puntos más importantes a diagnosticar del vehículo eléctrico, con especial incidencia en el conversor/inversor, que es el encargado de transforma los 400V en 12V, y señaló que solo deben reparar vehículos eléctricos aquellos que tengan personal formado y cualificado para ello, tal y como indica el Real Decreto 614; es decir, talleres especializados en este tipo de trabajos.

Señaló que lo primero que debe hacerse es una diagnosis general, que es prácticamente idéntica a la de un vehículo convencional, aunque teniendo en cuenta las peculiaridades del vehículo eléctrico, como que no tiene aire, no tiene caudal de prácticamente nada, no tiene turbo ni intercooler ni servofreno, etcétera. Lo primero es hacer un test global, para ver las capas que tiene el motor: conversor, inversor, motor, etcétera. Es necesario, por tanto, saber qué lleva el vehículo para poder diagnosticarlo posteriormente. Los parámetros más interesantes a leer son los básicos: tensión de la batería, par (si es positivo: aporta tracción. Negativo: regeneración de energía), régimen del motor y temperatura de los componentes. Generalmente, los vehículos eléctricos disponen de dos bombas de agua, una para el motor y otra para el inversor. Otro parámetro a comprobar es saber si la batería está aportando o recibiendo amperios.

El formador de Hella siguió explicado otras peculiaridades de la diagnosis del vehículo eléctrico, que pueden seguirse en el siguiente enlace, previo registro.