Las ventas de Bosch en España crecieron el 6% en 2018
Su división Mobility Solutions, que incluye el negocio de posventa, alcanzó 1.400 millones de euros, el 5% más que el año anterior.
Bosch en España va bien. Y sigue siendo un mercado clave para la multinacional en Europa. Así lo certifica la cifra de negocio alcanzada en 2018, un total de 2.500 millones de euros, lo que significa un incremento del 6% respecto al ejercicio anterior. De esa cantidad, 1.400 millones (56%) correspondió a su división Mobility Solutions, que creció en torno al 10%, a pesar de la ligera disminución de la producción de vehículos en España.
En esta división se integra también, entre otras, su actividad de posventa de automoción, una línea que ayudó a esos buenos registros, con un aumento en las ventas en torno al 5% respecto a 2017, aseguró Javier González Pareja, presidente de Bosch España, en respuesta a una pregunta realizada por Infotaller durante la Conferencia de Prensa anual de la compañía.
Con una plantilla de 8.650 empleados en España, el Grupo Bosch invirtió unos 80 millones de euros en nuestro país en 2018. El primer directivo de Bosch en España repasó algunos de los hitos de la compañía durante el año pasado que, en relación con la movilidad, fueron la puesta en marcha en Barcelona, a través de su filial ITK Engineering, de un Software Hub, y del aumento en 500 unidades de la flota de scooters eléctricos compartidos (COUP) en Madrid, una nueva forma de desplazamiento por el centro de la capital.
A nivel mundial, Bosch apuesta por el fortalecimiento de la movilidad eléctrica, al tiempo que se optimizan los motores de combustión interna. Así, en 2025 la multinacional alemana pretende alcanzar unas ventas de 5.000 millones de euros ligadas a la electromovilidad, diez veces más que en 2018.
Los cálculos de la marca estiman que a finales de 2022, un total de 14 millones de vehículos eléctricos llevarán componentes Bosch, frente al millón de unidades actuales.
Además, la empresa invertirá 4.000 millones de euros hasta 2022 en proyectos sobre la conducción automatizada. A pesar del avance de la electrificación, Bosch estima que en 2030 el 75% de los vehículos nuevos que se fabriquen será propulsado por un motor de combustión.
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