Prácticamente la mitad de los turismos que hay en circulación en España (el 48,8%) supera los 15 años de antigüedad, un porcentaje que ha aumentado 0,5 puntos porcentuales en el último año, reflejando así el progresivo envejecimiento del parque automovilístico.
Según un informe de Ideauto basado en datos de la Dirección General de Tráfico (DGT) y difundido este miércoles por la patronal de fabricantes Anfac, el parque total de vehículos en España ha alcanzado los 31,3 millones de unidades en 2024, lo que supone un incremento del 1,9% respecto al año anterior. Este constante crecimiento unido a la falta de renovación de los vehículos hacen que la edad media del parque se haya situado en 14,6 años.
Además, casi un tercio del parque español de vehículos tiene más de 20 años, con un crecimiento del 11,2% en el último año hasta situarse en 8,7 millones de unidades. Además, los vehículos de menos de cinco años solamente representan el 16,4% del total, un porcentaje que entre los turismos se reduce al 16,2%. "En 2024 siguieron en circulación más de 8,5 millones de vehículos con más de 20 años de antigüedad, lo que resulta especialmente preocupante, no sólo en términos de emisiones, sino también en seguridad", ha defendido el director general de Anfac, José López-Tafall, al presentar estos datos.
Por tipo de vehículo, los turismos representan el 84,5 % del parque con 26,5 millones de unidades (un 1,7% más que un año antes); seguidos por los comerciales ligeros, con 4,1 millones (tras aumentar un 2,7% en el último año); los industriales con 616.878 (con un avance del 3,4% interanual) y los autobuses con 64.097 (un 1,9% más).. La mayor edad media se registra en los vehículos industriales, con 15,1 años, mientras que los autobuses son los más nuevos, con una media de 11,5 años. Estos últimos son la única categoría que "rejuvenece" su parque.
Más de una cuarta parte no tiene distintivo ambiental
En términos medioambientales, los vehículos sin el distintivo ambiental han disminuido un 6,9%, pero aún representan el 26,9% del total. El distintivo clasifica los vehículos según sus emisiones y no tenerlo indica que el vehículo no cumple con los estándares mínimos y puede estar sujeto a restricciones en zonas de bajas emisiones.
En contraste, los vehículos con etiqueta C (turismos de gasolina matriculados a partir de 2006 y diésel desde 2014) han crecido un 5,7%, alcanzando el 36,4 % del total. Los electrificados (con etiqueta ECO-híbridos, vehículos de gas o de bajas emisiones- y con etiqueta 0 -eléctricos e hidrógeno-) han aumentado un 30 % y un 34,9 %, respectivamente, aunque siguen siendo minoritarios, representando solo el 8,3 % del total. La etiqueta B se otorga a turismos y furgonetas ligeras de gasolina matriculados desde 2001 y diésel desde 2006. Éstos han disminuido un 1,8 %, representando ahora el 29,2 % del parque.
Aunque lento, el crecimiento de los distintivos ambientales y la electrificación apuntan a una evolución hacia una flota más sostenible en el futuro.
Casi 3 de cada 5 vehículos siguen siendo diésel
La electrificación ha avanzado en todas las categorías, con un aumento de un punto porcentual en autobuses (hasta el 2,7%) y de 0,4 puntos en turismos (1,7%). Así, el parque de vehículos electrificados ha alcanzado las 495.086 unidades en 2024, lo que representa el 1,6% del total. Así, se constata un aumento de este tipo de vehículos, principalmente en los industriales y en los autobuses, que crecieron un 73,8% y casi un 60%, respectivamente.
A pesar de este crecimiento, los vehículos diésel siguen dominando el parque con un 58,9% del total (casi tres de cada cinco), después de haberse reducido un 0,5% respecto a 2023, para quedar en 18,4 millones, seguidos de los de gasolina con un 33,8%.
Por canales de propiedad, el 75,8% del parque pertenece a particulares, con un incremento del 2,6% en el último año. Las empresas concentran el 14,2%, mientras que el alquiler representa un 1,9%.
