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Ford usa 'gremlins' humanos para sabotear los controles de calidad en Almussafes

La planta de Valencia cuenta con empleados que insertan en secreto piezas equivocadas o defectuosas en la línea de montaje.

Redacción

16 de noviembre 2016 - 18:41

Ford usa 'gremlins' humanos para sabotear los controles de calidad en Almussafes
Ford usa 'gremlins' humanos para sabotear los controles de calidad en Almussafes / Redacción Infotaller

La planta de Almussafes (Valencia) de Ford cuenta con empleados que insertan piezas equivocadas o defectuosas en la línea de montaje de los vehículos, con el fin de poner a prueba los controles de calidad del centro, según ha informado la compañía.

La firma del óvalo ha apuntado que estas pruebas, que los trabajadores realizan en secreto, se basan en una tecnología fotográfica que comprueba y localiza las piezas de los vehículos en este centro. Para mostrar su funcionamiento, Ford Europa ha editado un vídeo (en inglés) en el que cuenta cómo es el trabajo de estos 'gremlins' humanos.

El sistema de visión de Ford fotografía, comprueba y localiza cada pieza y componente en cada uno de los 400.000 vehículos y 330.000 motores que se montan anualmente en su factoría valenciana, lo que sirve para validar, según el fabricante, "que el sistema funciona de forma correcta".

“El sistema de visión es fundamental para comprobar que cada pieza de cada vehículo es la correcta”, afirma Xabier Garciandia, especialista técnico de Sistema de Visión de Motor de Valencia. “El ‘test gremlin’ nos permite garantizar que el sistema funciona perfectamente. Es un juego con un objetivo muy serio. El equipo se emociona mucho cuando encuentran una de las piezas que intentamos colarles, y cada vez intentamos que les resulte más difícil encontrarlas”.

Esta tecnología captura más de mil millones de fotos cada catorce días, el equivalente al número de fotos publicadas en Instagram en Europa en un periodo similar. Esto también ayuda a generar una imagen compuesta, formada por 3.150 fotografías que destacan cualquier discrepancia a los ingenieros.

En Valencia, hasta el momento, se han enviado a la línea de montaje piezas de motor defectuosas, volantes incorrectos e incluso paneles incorrectos. Los 'test gremlin' se han ampliado a las 34 fases de montaje, y la marca está evaluando la implantación global de este proceso.

“La utilización de cámaras digitales ha cambiado totalmente la manera en que registramos nuestro modo de vida, y ahora estamos transformando la manera en que construimos motores y coches”, afirma Garciandia. “Pero también tenemos que probar los tests y lo estamos haciendo de una manera muy sencilla pero que consideramos única dentro del sector de la automoción”.

El fabricante ha introducido en los últimos tiempos una serie de procesos de calidad rigorosos y, en algunos casos, inusuales en la planta valenciana, de donde sale un vehículo cada 40 segundos de la línea de producción.

Estos métodos incluyen, entre otros, micrófonos ultrasensibles que comprueban que los conectores de los motores hayan sido bien instalados; 'escuchadores de motores' que comprueban que cada nuevo Ford Focus RS funciona a la perfección; o plumas de emú que se utilizan para quitar el polvo a los modelos antes de pintarlos.

Ford fabrica en Almussafes los modelos Kuga, Kuga Vignale, Mondeo, Mondeo Vignale, Galaxy, S-MAX, Transit Connect y Tourneo Connect, así como los motores EcoBoost 2.0 y 2.3 litros.

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