La Inspección Técnica de Vehículos comprueba el estado de los elementos del coche. Para evitar posibles multas en estas evaluaciones, Asetra (Asociación de Talleres de Madrid) aconseja a los usuarios que visiten previamente un centro especializado y realizar una pre-ITV que revise a conciencia los vehículos.

En la ITV, explica la asociación, los técnicos verifican que todos los elementos y sistemas del coche funcionen de forma correcta y que su posible mal funcionamiento no afecte ni a la seguridad de los usuarios ni al medioambiente.

Entre los aspectos que tienen más en cuenta los técnicos, Asetra destaca la iluminación, la carrocería y acondicionamiento exterior, la presión y desgaste de las ruedas, así como los frenos, los niveles, la suspensión, los ejes y las rótulas.

Por otro lado, si se detectan defectos leves durante la ITV, los usuarios disponen de dos meses para solucionarlo y, después, volver a pasar la inspección. En el caso de que los defectos sean muy graves, el vehículo quedará inmovilizado y una grúa lo trasladará hasta un taller para su reparación.

Asimismo, la DGT especifica que las infracciones graves conllevan multas de 200 euros y las muy graves 500 euros. Además, las autoridades de tráfico podrán sancionar aquellos propietarios de coches que no hayan pasado la ITV.