Liqui Moly lanza dos nuevos productos para la movilidad eléctrica
El fabricante alemán saca al mercado aceite para caja de cambios para Tesla y líquido refrigerante para células de combustible.
Liqui Moly ha desarrollado un refrigerante para células de combustible, así como un aceite especial para caja de cambios sólo para vehículos eléctricos.
David Kaiser, director de Investigación y Desarrollo en Liqui Moly, asegura: que “este es solo el principio” de lo que tiene en proyecto. “Cumplimos nuestra promesa: ofrecemos los productos adecuados para todos los vehículos del mundo”, señala Kaiser.
En Europa, EE. UU. y también en gran parte de Asia, la movilidad eléctrica no se detiene. En el futuro, explica Kaiser, “por lo general, habrá una mezcla de diferentes conceptos de propulsión”. “Cada vehículo y cada fabricante requieren requisitos diferentes. Con nuestro trabajo de investigación nos aseguramos de que se cumplan todas las homologaciones y requisitos y de que se suministre la máxima calidad, afirma.
FCF 20 y ACEITE PARA CAJA DE CAMBIOS
El refrigerante para células de combustión FCF 20 de Liqui Moly a base de etilenglicol, combinado con aditivos no iónicos, apenas conduce la electricidad y combina una disipación óptima del calor con una excelente compatibilidad de materiales y estabilidad frente al envejecimiento.
“Nuestro FCF 20 no solo está diseñado para la disipación del calor, sino que también ofrece la protección a largo plazo típica de Liqui Molly para todos los componentes”, informa Kaiser.
“Es una falacia que los vehículos eléctricos no necesiten aceite. De hecho, necesitan un lubricante de muy alta calidad para la caja de cambios”, explica David Kaiser.
En este caso, Liqui Molly también ofrece el nuevo aceite para caja de cambios Top Tec Gear EV 510, que cumple los estrictos requisitos del fabricante Tesla.
“En general, la mayoría de los productos de Liqui Moly son adecuados para todo tipo de accionamientos, independientemente de si se trata de un motor de combustión, un vehículo eléctrico, un híbrido o una célula de combustión. Las homologaciones de los fabricantes son decisivas. Siempre que se utilicen productos especiales, ofreceremos soluciones. Esto es independiente de la propulsión”, concluye Kaiser.
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