Pintura de acabado: cuándo y cómo se debe difuminar
El profesional del taller de chapa y pintura cuenta con algunas técnicas, como el difuminado de color, que nos ayudará a minimizar las diferencias de color a ojos del cliente, obteniendo una óptima igualación, integración y ajuste de color.
Hoy en día, la amplia diversidad de tonos y efectos existentes en el mercado así como la extensa oferta de colores ofrecida por los fabricantes (muchos de ellos con sus propios pigmentos y tolerancias de los colores originales) dificultan enormemente la tarea de igualación de color en la carrocería. Por ello, en Sinnek Academy queremos ayudar a los profesionales en su día a día, explicándoles, por ejemplo, cuándo y cómo se debe difuminar la pintura de acabado.
El pintor profesional puede haber hecho una preparación perfecta del fondo y una correcta aplicación del color en términos de extensibilidad y homogeneidad, pero si no se obtiene una buena igualación de color, todo el esfuerzo y trabajo invertido habrá sido en balde.
Por suerte, el profesional del taller de chapa y pintura cuenta con algunas técnicas, como el difuminado de color, que nos ayudará a minimizar las diferencias de color a ojos del cliente, obteniendo una óptima igualación, integración y ajuste de color.
¿Qué es un difuminado de pintura?
En el repintado de carrocería, la técnica del difuminado consiste en aplicar el color sobre determinadas zonas de las piezas adyacentes a la reparación, degradando de más a menos la cantidad de pintura a aplicar, a través de una suave transición.
Es decir, se trata de “fundir” el color entre piezas para que no se note un cambio en la unión de las mismas. El objetivo es evitar diferencias de color y una óptima integración entre la pieza a reparar y las contiguas, sobre todo en colores complejos, como puede ser el color 46V Soul Red Crystal de Mazda.
De este modo, contribuimos a que las pequeñas diferencias de color entre la pintura aplicada y la original sean imperceptibles para el ojo humano.
Cómo lograr un buen difuminado en un coche y sus ventajas
Con esta técnica limitamos la zona a reparar, optimizando el consumo de producto (pintando la menor cantidad posible de piezas y reduciendo espesores de capa) y garantizamos la igualación de color.
Se trata de una técnica que complementa el proceso de reparación y mejora la reproductividad del color.
Por otro lado, los tiempos de reparación son más reducidos, obteniendo ganancia de tiempo en los procesos de enmascarado, montaje y desmontaje de piezas, aparejado o secado.
El difuminado lo podremos aplicar en acabados tanto monocapa, como acabados bicapa o acabados tricapa (difuminando en estos casos tanto el color como el barniz).
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Hay que tener en cuenta que el difuminado de piezas difiere del pintado parcial de piezas, donde centramos la reparación en la misma pieza, sin salirnos de sus límites.
En reparaciones de colores lisos no suele ser tan recurrente el uso de difuminados, a no ser que tengamos problemas de igualación o no contemos con una variante de color adecuada al color de la carrocería. Además, hay ocasiones en las que pueda ser conveniente el uso de probetas para pruebas de color, realizando las pruebas necesarias para asegurar una correcta igualación.
Sin duda, contar con un sistema de pintado que ofrezca una gran capacidad de difuminado será el mejor aliado en cualquier tipo de reparación, por compleja que sea.
Un buen ejemplo es la Serie W6000, el sistema bicapa base agua de Sinnek de alto rendimiento, que además de un gran poder de difuminado, ofrece un alto nivel de cubrición y colorimetría, con el que conseguir una alta productividad y un excelente acabado final.
Factores que provocan problemas de igualación de color en carrocería
Veámos algunos factores que pueden producir una mayor dificultad en la obtención de una correcta igualación de color:
- Dificultad a la hora de obtener una fórmula de color que se ajuste al color de la pieza a reparar
Puede ser por que el vehículo ha sido previamente repintado, por no contar con una variante de color que se ajuste totalmente, o por una degradación de la pintura por el paso del tiempo.
- Incorrecta preparación de la mezcla de color
Desajustes en la cantidad y proporción de los básicos de color en la mezcla. El profesional debe contar con una correcta técnica y experiencia, tanto durante la aplicación de la pintura como en los procesos de preparación previa de la pieza y el color.
- Incorrecta orientación de las partículas de efecto
Suele producirse sobre todo en colores metalizados y perlados (especialmente en tonos plata o champagne), provocada por una incorrecta técnica de aplicación por la ausencia de mano de control.
Este tipo de colores contienen una gran cantidad de partículas de aluminio, y su correcta distribución y colocación será fundamental para una buena integración del color.
En las zonas degradadas donde aplicamos menos cantidad de pintura, estas partículas se pueden orientar o colocar de forma diferente, lo cual puede dar lugar a sombras o ráfagas.
Condiciones de aplicación incorrectos
- Temperaturas extremas.
- Viscosidad inadecuada de la mezcla.
- Regulación de los equipos de aplicación (paso de producto, abanico, presión).
- Técnica de aplicación del profesional (velocidad, distancia, movimiento, etc).
- No ajustar el color de aparejo con respecto al color de acabado: este factor, además de generar un problema de igualación de color, ocasionará problemas de cubrición, siendo necesario un mayor consumo de producto.
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¿Cuándo es aconsejable realizar un difuminado?
Generalmente, la técnica del difuminado de color la emplearemos en los siguientes casos:
- Áreas de alta visibilidad: zonas de la carrocería muy expuestas como aletas o puertas.
- Piezas de sustitución.
- En colores metalizados o perlados (debido a la orientación de las partículas, cuya colocación puede hacer variar el tono y brillo de la pieza).
- En daños ubicados sobre los bordes de las piezas, colindantes con otras. Si las piezas adyacentes forman ángulo en la línea de solape no será necesario el difuminado. Esto es habitual en el caso de aletas con capós y la razón por la que no es necesario el difuminado es porque el ángulo que forman genera ya de por sí, una distinta percepción del efecto metalizado o perlado, con las que las desviaciones de color debidas a la aplicación se enmascaran.
Tipos de aplicación en la reparación de un vehículo
- Pintado completo de pieza o pintado al corte
Se basa en la aplicación de color a la pieza completa, sin tener en cuenta el tamaño de la superficie dañada.
Es una técnica que se suele emplear más en colores que presenten menos dificultades como colores lisos o colores oscuros. Sin embargo, es un método de aplicación que no se recomienda en la reparación de colores más complejos como colores metalizados y perlados.
- Pintado parcial
El pintado parcial se basa en aplicar barniz o color solo a la parte delimitada de pieza que contenga el daño, no aplicando sobre la pieza completa.
Esta técnica se suele utilizar en zonas en las que existan molduras o pliegues en paneles de carrocería que facilitan la separación visual de las piezas (también zonas estrechas de baja visibilidad).
- Pintado con difuminado
En función del tamaño del daño a reparar y su localización en la pieza, podremos clasificar el difuminado de color en dos escenarios diferentes:
Tipos de difuminado
1. Difuminado de color en la misma pieza
Una situación habitual puede ser que el daño a reparar sea de pequeño o mediano tamaño y se encuentre alejado de la zona limítrofe con respecto a las piezas adyacentes, teniendo margen de actuación antes de llegar a los límites de la pieza a reparar.
Es estos casos, podríamos optar por realizar un difuminado dentro de la misma pieza. De este modo, reducimos el riesgo de que se aprecien diferencias de color con las piezas adyacentes.
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Pasos para difuminar color en la misma pieza
- En primer lugar, aplicamos una mano de color sobre el parche, procurando hacer un pequeño degradado de la cantidad de pintura, sin extendernos demasiado y aplicando el color en todas las direcciones en el límite del parche.
- Cuando esta primera mano haya evaporado, procedemos a aplicar una segunda mano de mayor extensión con la que cubriremos completamente el parche, volviendo a hacer un degradado desde fuera hacia los límites del parche. Es fundamental no aplicar color en los extremos de la pieza, evitando comprometer la correcta igualación de color.
- En colores metalizados o perlados, una vez que esta segunda mano se haya evaporado, podemos aplicar una mano pulverizada para un mejor ajuste del color y orientación de las partículas (intentado no aplicar sobre los extremos de la pieza).
- Finalmente aplicamos la capa de barniz.
2. Difuminado de color en piezas adyacentes
En situaciones donde el daño a reparar sea demasiado grande (así como en sustitución de piezas nuevas) será necesario aplicar color a la pieza completa, realizando la técnica del difuminado sobre la pieza o piezas adyacentes del daño a reparar.
Esta técnica de reparación suele ser más utilizada en reparaciones de piezas laterales del vehículo, debido a su orientación vertical, lo cual puede dar lugar a mayores variaciones de color y brillo.
Pasos para difuminar color en la misma pieza
- En primer lugar aplicamos una primera mano sobre el daño a reparar, extendiéndonos ligeramente hasta la pieza o piezas adyacentes.
- Esperamos a que evapore, y aplicamos una segunda mano cubriendo toda la pieza a reparar. Posteriormente, aplicaremos sobre las piezas adyacentes una mano de color, difuminando de forma oblicua desde la pieza a reparar hasta el extremo opuesto.
- Una vez evapore, aplicamos una mano de control sin llegar a los extremos de la pieza adyacente.
- Aplicamos la capa de barniz final.
Bonus final: difuminado del barniz
También es posible difuminar el barniz, lo que nos aportará un menor consumo final de producto.
El difuminado de barniz se realiza sobre todo en colores bicapa, cuando se ha difuminado el color y se quiere evitar el barnizado de la pieza completa. Con el difuminado de barniz también conseguimos evitar la acumulación de pintura de forma escalonada sobre la superficie.
Una vez la aplicación de color haya evaporado, aplicamos una primera mano de barniz toda la superficie difuminada con color, llegando casi hasta la zona de unión con la pintura original.
Posteriormente aplicamos una segunda mano, sobrepasando el radio de aplicación de la primera, con el fin de que el solapamiento entre capas sea lo más fino posible.
Conclusión
Como hemos comprobado, la correcta reproductividad del color juega un papel fundamental a la hora de obtener una reparación de calidad, no perceptible al ojo humano.
En consonancia, el difuminado de color en carrocería será una de las principales técnicas a dominar por parte del pintor profesional con el objetivo de optimizar la integración de la reparación. Saber cómo difuminar y cuándo hacerlo influirá directamente en la productividad y rentabilidad de cualquier reparación.