El papel de los talleres como transformadores en la transición hacia la movilidad sostenible
Los centros de reparación deben ser prescriptores a la hora de concienciar a los usuarios sobre alternativas existentes, como el GLP y el GNC, para contribuir a la descarbonización.
La importancia de renovar el parque de vehículos hacia un modelo más moderno y eficiente en el camino hacia la descarbonización de la movilidad es una realidad. Una de las alternativas que encontramos en el mercado de la automoción es la transformación de los vehículos que actualmente emplean motores de combustión interna hacia otros tipos de propulsión más respetuosas con el medioambiente. Un tema de gran relevancia y que ha sido protagonista del webinar "La contribución de los transformadores hacia una movilidad sostenible"; organizado por la Asociación de Transformadores de Vehículos (Astrave) y el instituto de Seguridad de los vehículos Automóviles de la Universidad Carlos III de Madrid.
En este encuentro ha tenido lugar una mesa redonda centrada en la "Aportación de los transformadores a la calidad del aire de las ciudades", en la que han participado Nuria Álvarez, directora de Relaciones Institucionales y Comunicación de Conepa; Ramón Casas, secretario general del Gremio de Talleres de Barcelona y representante de Cetraa; Germán Palomas, gerente Dual Fuel GNC/GLP de Dim Sport; Nacho Pérez, gerente BI Fuel GLP de Ircongas; y Ángel Parras, presidente de la Asociación de Empresas de Distribución de la Comunidad de Madrid (Aedisma); bajo la moderación de Juan Francisco Calero.
Actualmente el debate se centra especialmente en la necesidad de electrificación del parque, dejando a un lado energías alternativas que pueden contribuir en este camino de transición, como el GLP y el GNC. Como ha apuntado Nacho Pérez, "no podemos dirigirnos solo al vehículo eléctrico, está claro hacia donde nos dirigimos pero necesitamos un período de transición, y para eso hay energías interesantes, y la transformación de los vehículos", haciendo hincapié en que "al menos nos quedan 10 años de un mix energético que va a depender del tipo de uso o del usuario de cada vehículo". Por su parte, Ángel Parras ha insistido en la necesidad de encontrar facilidades a la hora de homologar las modificaciones.
Desde el punto de vista de los talleres en cuanto a la neutralidad, Nuria Álvarez ha destacado que "poco tenemos que decir al respecto ya que vamos a reparar, a atender los vehículos que decidan nuestros clientes comprar", y ha subrayado que "el sector de la transformación tiene un problema de comunicación que se ha puesto de manifiesto en la cantidad de dudas que suscita este tema, todas las posibilidades técnicas".
En este sentido, ha recalcado el desconocimiento de los usuarios sobre las posibilidades de transformación de sus vehículos, lo que hace necesario que el taller este informado, ya que puede "ser prescriptor y aconsejar al cliente, porque el usuario le va a preguntar y tiene que saber responder", diferenciando entre dos tipos de talleres "los que apuestan como alternativa de negocio a transformar negocios, y el resto que no van a a transformar pero que sí van a poner al día y reparar a esos coches".
Por su parte, Ramón Casas ha acentuado la falta de información que existe en el sector, explicando que "partimos de un discurso político con el que estamos comprometidos: la mejora medioambiental y el camino hacia una movilidad sostenible. Pero luego estos hechos se apartan del discurso y nos encontramos con prohibiciones, con un aumento de carga impositiva, medidas que pasan por el achatarramiento y la adquisición de vehículos eléctricos, etc. Aquí estamos fallando, hay que allanar el camino, la transformación debe jugar un papel en esa transformación eficaz hacia la electrificación del parque, que debe plantearse a un periodo medio-largo".
En este sentido, considera que los talleres necesitan conocer todas estas tecnologías, pero también debemos transmitírselo a la clase política, para facilitar la homologación de vehículos transformados". En definitiva, "necesitamos de información, de formación y darlo a conocer".
En relación al sistema actual de etiquetado y a su modificación, ¿enemigo o aliado?, para Nacho Pérez "es una herramienta fundamental para el desarrollo de una tecnología"; la representante de Conepa ha insistido en "pedir que las correcciones se hagan de forma meditada y se expliquen correctamente para no estar cuestionando el sistema continuamente, que sean concluyentes y determinantes"; mientras que Ramón Casas, ha señalado que "entendemos que la clasificación ambiental puede ser hasta necesaria para controlar cuáles son los que más emiten pero reclama "una tecnología que permita controlar los kilómetros recorridos por un vehículo".
En cuanto al papel de la posventa en esta transición, los representantes de Conepa y Cetraa han coincidido al calificar los próximos años como "apasionantes y cargados de cambios". Nuria Álvarez ha destacado que no puede hablarse de disrupción, "sí de una evolución avanzada que permite la adaptación también de los talleres. Todavía hay un parque de convencionales. La transición no va a ser traumática", distinguiendo entre dos tipos de talleres: aquellos con voluntad de jubilarse en los próximos años o aquellos que van a seguir trabajando y que necesitan invertir en formación y equipamiento. "El sector está preparado para afrontar el cambio".
Ramón Casas también se ha mostrado convencido de la adaptación del sector. "No va a ser de hoy para mañana, va a ser progresivo y no va a haber disrupción como dice Nuria. Van a estar los que quieren estar". Asimismo, ha añadido que "pasaremos por una mayor especialización, y puede que por la colaboración, pero a años vista".
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