Los talleres de Burgos también miran al otro lado del Atlántico como solución a la falta de mano de obra
En el período estival, las listas de espera superan en muchos casos los 60 días. Por ello, buscan en Argentina, Chile y Perú profesionales dispuestos a venir a España a trabajar.
La creciente falta de personal en un buen puñado de sectores profesionales plantea un futuro incierto a medio y largo plazo. Una problemática que podría agudizarse en el caso de no encaminar un relevo generación sostenido y adecuado. Los talleres no están exentos de incierto futuro. Y lleva meses fijándose al otro lado del Atlántico para buscar profesionales. Ahora lo hacen también los talleres de Burgos.
Según “El Diario de Burgos”, este gremio -en el que la alta demanda supera en muchos casos la capacidad de las empresas- está valorando fijar la vista al otro lado del Atlántico, concretamente, en América. Asociaciones como Adeabur -Asociación de Empresarios de Automoción de Burgos- estudian recuperar el programa de contrataciones desarrollado hace ya un par de décadas, cuando llegaron profesionales de Polonia.
La hoja de ruta pretende evitar una lista de espera que en algunos periodos son evidentes y muy palpables, por ejemplo, en la época estival, cuando, en algunos casos, puede alcanzar los 60 días de espera.
“Ahora en verano hay más movimientos en la carretera y eso trae más averías y más siniestros de diversa importancia, es la tormenta perfecta”, explica Gabriel Martínez, secretario general de Adeabur. “La demanda crece en un momento en el que los trabajadores tienen que disfrutar de su descanso, lo que agrava un problema que ya es habitual porque es difícil encontrar personal cualificado: no hay relevo", ahonda en el agujero negro que surge bajo la canícula.
En estas circunstancias, Adeabur propondrá a las empresas asociadas la búsqueda de mano de obra procedente del extranjero. El colectivo ya solicitó en 2004 un contingente de extranjeros para cubrir las necesidades más urgentes de entonces. La iniciativa -desarrollada con la embajada de Polonia y la colaboración de Cruz Roja- permitió la llegada de 16 profesionales cualificados llegados del país centroeuropeo y posteriormente se solicitó la llegada de otros seis trabajadores con un perfil concreto que ayudó a solventar los problemas que arrastraban los talleres burgaleses.
Ese éxito invita a rescatar ahora aquella alternativa. Un planteamiento que se encuentra aún en fase embrionaria, si bien se estima que se podría duplicar el número de profesionales incorporados al mercado desde el extranjero dos décadas atrás. Ya se dispone de los contactos y se trabaja para en los próximos meses concretar los perfiles solicitados y las demandas más acuciantes.
En esta ocasión, Perú, Argentina y Chile se presentan como las principales opciones para llevar a cabo una iniciativa de contratación que en otras provincias como Ourense ya impulsan con el objetivo de incorporar en los próximos meses un contingente de soldadores.
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