De las medidas técnicas a los riesgos: ¿Está preparado el taller para reparar eléctricos?

“La seguridad personal y del taller es primordial a la hora de reparar automóviles eléctricos”, esta es la conclusión principal extraída de la webinar organizada por Centro Zaragoza e impartida por Ana Olona Solano, responsable de Vehículo Eléctrico y Movilidad en Centro Zaragoza.

Este encuentro se inscribe en los preparativos de la próxima edición de Motortec Madrid, que organiza Ifema Madrid en su Recinto Ferial, del 20 al 23 de abril de 2022.

“Ha habido una importante evolución tecnológica en la automoción: desde la conectividad de los vehículos, los materiales más ligeros y tecnologías consolidadas de sistemas de propulsión hasta los sistemas avanzados de seguridad”, comienza explicando Olona.

Esta evolución trae consigo nuevos riesgos y medidas de seguridad en los talleres de reparación de vehículos. Desde Centro Zaragoza afirman que puede haber riesgos eléctricos, ya que hay componentes de alta tensión; químicos, ya que las baterías de alto voltaje contienen un electrolito que probablemente sea inflamable o corrosivo, como el hexafluorofosfato de litio, que puede formar ácido fluorhídrico y que tiene capacidad para entrar en la piel humana y causar lesiones; o riesgos de incendio, ya que la batería puede arder bien por un sobrecalentamiento debido a un cortocircuito tras una colisión, o bien porque la integridad de la batería se haya visto comprometida.

ADAPTACIÓN DEL TALLER

Olona afirma que es “necesario y muy importante” cumplir los requisitos de homologación de los dispositivos y herramientas de reparación, así como disponer de medidas de seguridad.

Las medidas de protección que debe llevar a cabo el personal del taller de reparación se agrupan en medidas técnicas, como el aislamiento o la cubierta fija; personales, como equipos de protección personal; u organizacionales, como el acto de esperar un tiempo apropiado para disipar el voltaje.

“Es primordial que el taller cuente con el equipo y el software de reparación adecuados así como con expertos con capacidad y habilidad necesaria”, asegura Olona. Desconectar el circuito eléctrico, asegurar el sistema contra la reconexión, comprobar la ausencia de tensión y cubrir o bloquear el acceso a piezas cercanas sometidas a tensión y delimitar la zona de trabajo es el procedimiento a seguir a la hora de establecer las medidas de seguridad para reparar un coche eléctrico.

“Como medida de precaución, debemos tener en cuenta que al extraer el conector de mantenimiento puede existir tensión alta entre los bornes de las baterías, los contactores y conector de de mantenimiento, así como en las interconexiones del módulo de control de la batería”, señala Olona.

Por último, la responsable de Vehículo Eléctrico y Movilidad en Centro Zaragoza remarca la importancia de la formación, técnica y en seguridad, para evitar problemas en la reparación. “La formación personal de prevención de riesgos laborales, la adaptación de las instalaciones, el equipamiento del taller y el uso de los equipos de protección individual obligatorios son aspectos claves para la manipulación segura de este tipo de vehículos”, concluye Olona.