El coste medio de la reparación alcanza ya los 596 euros
Un estudio de CarGarantie, que analiza las garantías de vehículos nuevos y de ocasión de todas las marscas, sostiene que la inflación, problemas de semiconductores y cadena de suministro también eleva el precio de las reparaciones. El motor es el componente con más averías, seguido del sistema de combustible, incluyendo el turbocompresor.
“Los costes medios de reparación han subido a casi 600 euros”, es la principal conclusión que se esgrime de los datos proporcionados por CarGarantie, dirigida por Ángel Mellado, que cada año analiza alrededor de un millón de garantías de vehículos nuevos y de ocasión de todas las marcas y modelos para documentar la evolución de los costes de reparación y la frecuencia de las averías.
En 2020, el coste medio aumentó 21 euros con respecto al año anterior alcanzando así los 572 euros, en 2021 una reparación costó de media 596 euros, considerándose así, el mayor incremento de los últimos años.
Ángel Mellado, director de CarGarantie España y Portugal explica que “son muchos los acontecimientos que han provocado el aumento de los precios en los últimos dos años: la escasez de semiconductores, el aumento de la inflación y las interrupciones de la cadena de suministro global. Esto también se refleja en los costes medios de reparación, que rondan los 600 euros”.
“Por lo tanto, los seguros de garantía y de costes de reparación son cada vez más importantes tanto para concesionarios como para clientes. Los clientes pueden protegerse contra costes de reparación imprevistos, y los concesionarios pueden ofrecer una muestra de calidad que, una vez más, contribuye a aumentar significativamente la confianza de los clientes de vehículos nuevos y de ocasión”, señala Mellado.
AVERÍAS
En el caso de los vehículos de ocasión, el motor sigue siendo el componente más caro: supone el 23,4% del importe de la liquidación de los siniestros. El sistema de combustible le sigue en segundo lugar con el 19,1% y la caja de cambios en el tercero con el 11,5%.
Se pueden apreciar más cambios en los vehículos nuevos: aunque el motor todavía ocupaba el primer lugar el año pasado, este año es el sistema de combustible, con una cuota del 20,5%. El motor le sigue en segundo lugar con un 20,1%, seguido del sistema eléctrico con el 12,2%. Por lo tanto, el porcentaje de los importes liquidados por fallos de motor disminuyó levemente, mientras que el resto se mantuvo sin cambios.
La distribución de la frecuencia de las averías también se mantiene prácticamente sin cambios, tanto en términos de tiempo como de porcentaje. En el caso de los vehículos de ocasión, el sistema de combustible sigue ocupando el primer lugar, con un 20,3%, seguido del sistema eléctrico con 18,7%, y el motor con 11,1%.
En el caso de los vehículos nuevos, el sistema de combustible también ocupa el primer lugar con un 19,2%. El sistema eléctrico le sigue en segundo lugar con un 19,1% y la electrónica de confort con un 10,9%.
En cuanto al momento en el que se produce la avería, hay pequeñas diferencias con respecto al año anterior. Mientras que el año pasado solo el 29,0% de los siniestros en vehículos de ocasión se dieron dentro de los primeros 5.000 km, este año es del 30,4%, es decir, ha aumentado 1,4 puntos porcentuales. El siniestro tiende a aparecer un poco antes. El 18,9% de los daños, en cambio, sólo se produjeron con más de 25.000 km. En términos de tiempo apenas hay cambios: el 23,2% de las averías solo se produce tras más de 360 días.
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