La OCU rechaza la persecución al diésel por injusta e ineficaz
Reparación
La entidad prevé una caída en las ventas de estos vehículos y un envejecimiento del parque móvil.
El reciente aumento del impuesto al diésel es considerado por la OCU como una medida injusta para los consumidores, además de ser ineficaz, desde un punto de vista medioambiental. Por ello, la entidad apunta que el objetivo es “combatir es el uso de los vehículos más contaminantes, independientemente del combustible”.
Pese a que los automóviles diésel han emitido muchas más partículas que los de gasolina, los filtros de partículas en este tipo de coches y los nuevos motores de gasolina de baja cilindrada han hecho que unos y otros estén muy igualados, motivo por el que la organización apunta que los impuestos de ambos combustibles también deberían igualarse.
Asimismo, añade que la demonización de los vehículos con motores diésel no tiene sentido, ya que la subida de esta carga impositiva afectará sobre todo a los consumidores con vehículos más antiguos, que serán los que tengan más dificultades para comprar un coche nuevo que contamine menos.
Por todo ello, la OCU afirma que “es indispensable fomentar ayudas y facilitar alternativas para la adquisición de esos vehículos menos contaminantes”.
Con la actual propuesta fiscal, la entidad defensora de los usuarios prevé que habrá una caída en las ventas de estos coches y un envejecimiento del parque móvil, “lo que, a la larga, se traduce en un aumento de las emisiones de CO2 en los próximos años”.
Por último, la OCU asegura que la solución pasa por establecer unos límites de contaminantes durante el proceso de homologación de los vehículos, como los que ya existen, pero en condiciones reales, con lo que se evitarían sucesos como el Diéselgate, del que se acaban de cumplir tres años sin que los afectados hayan recibido las compensaciones exigidas, subrayan la organización.
Archivado en
No hay comentarios