Nuria Álvarez (Conepa): "Ha habido un antes y un después tras nuestras actuaciones durante la crisis"

2020 fue un año duro a todos los niveles. El sector de la reparación no se libra y por eso Infotaller ha querido entrevistar a Nuria Álvarez, responsable de Relaciones Institucionales de Conepa; con la intención de conocer cómo le ha afectado y le está afectando la pandemia a la patronal, su hoja de ruta más inmediata y sus planes para lo que queda de 2021 y, por supuesto, también para 2022.

- ¿Cómo fue el 2020 para la asociación? ¿Cómo ha afectado la pandemia a Conepa?

- 2020 fue un año durísimo para todos y eso incluye a los talleres. Seguramente fue el peor año de toda su historia para el colectivo como conjunto. Los primeros días tras la declaración del estado de alarma resultaron dramáticos. No estaba claro si podían abrir o no, fue un caos total. Cuando se confirmó su consideración como servicio esencial, se enfrentaron a una cruda realidad: no llegaba prácticamente nadie a sus instalaciones y la mayoría tuvo que cerrar por falta de actividad. A partir de junio, la actividad fue creciendo y finalmente compensó en parte los resultados marzo-mayo, con lo que, a nivel de todo el estado, la caída de facturación de los talleres alcanzó el 20 por ciento.

A nivel de Conepa, como federación de asociaciones y en los aspectos técnicos, 2020 resultó un año profesionalmente apasionante: nuestros técnicos y los de nuestras entidades miembro tuvieron que hacer un esfuerzo enorme, como nunca antes lo habían hecho. Durante semanas, nuestro horario de dedicación al sector fue de 24 horas los siete días de la semana.

Por otra parte, fue providencial la coincidencia de que, a principios de 2020, firmásemos un acuerdo estratégico de colaboración con Cetraa. Eso nos ha hecho muy fácil trabajar conjuntamente y acudir ante cualquier instancia con una elevada representatividad. Los talleres han agradecido y reconocido el esfuerzo realizado. Esta ha sido la parte positiva de la dura pandemia para las asociaciones. Ha habido un antes y un después tras nuestras actuaciones durante la crisis. Desde entonces, nadie ha puesto en duda nuestra razón de ser y la necesidad de nuestros servicios.

¿Qué hubiera sido de los talleres en aquellos primeros días de caos? ¿Hubieran conseguido abrir los que así lo decidieron? ¿Hubieran tenido acceso a los ERTE los que tuvieron que cerrar por falta de clientela o los que se vieron obligados a aquilatar sus plantillas a la demanda real? Aún no nos hemos recuperado de la pandemia a nivel social.

- ¿Sigue el Coronavirus afectando a la asociación?

- Claro que sí. La Covid 19 está presente cada día en nuestra actividad. En ese aspecto, ahora nuestro principal objetivo se centra en facilitar el acceso a los fondos europeos para la recuperación y resiliencia a las pymes de nuestro sector. Estamos trabajando mucho para dar a conocer las necesidades concretas de los talleres en este campo ante las instituciones europeas y españolas, pero también ante los organismos autonómicos que van a gestionar la mayor parte de las cantidades económicas de las que se podrán beneficiar las pymes.

Y, como hay que ser constructivo, valoramos también la oportunidad que nos ha dado la crisis sanitaria y económica de 2020 y la llegada de los fondos de ayuda para reflexionar sobre el futuro de los talleres y plantear un proyecto estratégico que engloba las necesidades reales de los talleres en cuanto a su adaptación a los nuevos tiempos.

- No puedo evitar coincidir, Nuria. Siempre hay que intentar sacar algo bueno de todo suceso y en este caso la oportunidad de reflexión sobre el futuro del taller es importante. Y esto me lleva a preguntarle por las líneas de actuación de Conepa para lo que queda de 2021.

- Hay varios campos en los que estamos trabajando, aunque todos muy relacionados con la necesaria modernización del sector. Más allá de la superación de la crisis pandémica, nos preocupa la adaptación de las empresas de reparación y mantenimiento de vehículos al cambio tecnológico que, aunque no va a ser disruptivo (con el elevado parque existente), sí hace indispensable que las empresas se planteen desde ya su camino individual hacia el nuevo entorno de movilidad sostenible.

En estos momentos, se “cuece” mucha normativa que tiene que ver con todo ello. Las asociaciones tenemos que estar muy pendientes de la génesis y evolución de nuevas normas que, incluso sin estar relacionadas directamente con el automóvil, pueden repercutir en las empresas asociadas. Un buen ejemplo de ello tiene que ver con los temas digitales y de ciberseguridad.

Y tanto en el campo más genérico de las leyes, hasta en la definición de estrategias personalizadas, las asociaciones tenemos mucho que aportar al sector.

- Hablando de leyes, estrategias y adaptación... ¿Alguna novedad en relación a la declaración de principios ante la iniciativa ‘Brújula digital’ presentada junto a Cetraa?

- La aportación de comentarios a este proyecto de la Unión Europea es un buen ejemplo de lo que hablábamos: en realidad, en este caso concreto, lo que hemos hecho es llamar la atención de las instituciones de la UE para que la complicada regulación del mundo digital no se convierta en una traba para el funcionamiento de las pequeñas empresas, ni para el libre mercado.

- El pasado 18 de junio se publicaba en la web de Conepa un seguimiento del Plan de Mejora de la Carrocería en los talleres de Madrid. En dicha publicación se expone que las asociaciones no pueden desarrollar una negociación colectiva de precios con las aseguradoras pero sí pueden y deben realizar estudios de mercado que cartografíen la situación del sector para defender su rentabilidad. ¿Cuál será el siguiente paso?

- El mundo de la reparación de carrocería es bastante complicado, dadas sus características: la mayor parte de las operaciones, realizadas por varios miles de pymes, las abona un pequeño grupo de grandes empresas, las aseguradoras. Eso genera un marco de relación complejo. El Plan de Mejora de la Carrocería implementado en Madrid y observado con atención por otras asociaciones (de hecho, ya hay varias que lo están poniendo en marcha en sus ámbitos territoriales) se basa en dar argumentos a los talleres para formarse mejor en todas las áreas, incluida la de la negociación individual con las compañías.

Próximamente presentaremos los resultados de una nueva encuesta en la que profundizamos en las prácticas potencialmente lesivas de algunas aseguradoras. Como se demostrará una vez más en la misma, no todas las compañías son iguales en su relación con los talleres.

- Desde Infotaller esperamos la publicación de sus resultados entonces, seguro que arrojan mucha luz. Mientras, cuénteme sobre la campaña informativa de Conepa en relación a la nueva etiqueta de neumáticos. ¿Está siendo eficaz? ¿Cómo están midiendo su impacto?

- La acción se inscribe dentro de la estrategia de información sobre la nueva etiqueta de los neumáticos. Afane nos ofreció la posibilidad de difundir un nuevo póster informativo y dijimos inmediatamente que sí. La experiencia anterior en esa misma línea y con la misma Afane desde que entró en vigor la “primera” etiqueta fue muy positiva: desde 2012 se entregaron pósteres en más de 10.000 talleres. La nueva campaña funciona muy bien porque subrayamos en el valor del póster su carácter de elemento que ayuda a cumplir la obligación informativa de los talleres cuando venden neumáticos.

- Llegamos ahora a la pregunta inevitable: ¿Cuál será la hoja de ruta que Conepa con respecto a los talleres ilegales en 2021?

- Esta es una cuestión siempre presente en nuestra relación de actividades. Aquí tenemos bien repartidas las tareas entre Conepa y sus asociaciones miembro. Mientras que desde la federación nos centramos en hacer una labor continua de denuncia del problema global ante las administraciones públicas competentes, son nuestras entidades las que, en sus diferentes ámbitos, se encargan de las denuncias puntuales; cada una tiene sus propios protocolos. Es un trabajo lento, difícil e ingrato, porque una buena parte de esa actividad que genera competencia desleal para los talleres se realiza en locales o fincas privadas, o incluso en la propia calle.

- Ingrato pero necesario y por eso hay que ponerlo en valor, al igual que otras labores que Conepa lleva a cabo. Sin ir más lejos, la asociación se ha mostrado públicamente a favor del Manual de procedimiento de Inspecciones ITV. Para ello habéis tenido que hacer una labor de revisión y valoración, claro.

- Tener una información completa y de calidad es siempre la mejor herramienta para hacer un buen trabajo. En este caso, el Manual es muy detallado y explica cada paso en el análisis que hacen las ITV de los vehículos. A los talleres les puede ayudar también a entender y resolver algunas averías complicadas que, a veces, se les resisten.

- Por otra parte, Conepa siempre ha llevado a cabo un trabajo muy activo en la lucha por la información técnica. El nuevo reglamento europeo, vigente desde 2018 garantiza este derecho. Pero... ¿Es esto suficiente, garantiza el acceso de una forma real o hay que seguir luchando?

- El acceso a la información técnica, hoy un concepto mucho más amplio de lo que lo era hace unos años porque implica otros aspectos (reparación en remoto, gestión de datos generados por el vehículo o ciberseguridad, por decirlo en resumen), es un asunto estratégico. Como ya hemos dicho varias veces durante nuestra conversación, no solo se trata de que las normas jurídicas lo permitan e incluso lo fomenten de manera teórica, sino que de los artículos que las desarrollan lo hagan posible de forma práctica.

- Llegamos al final de esta entrevista, Nuria. ¿Por dónde pasa el futuro? Planes de Conepa para 2022.

- Por seguir estando muy cerca de los talleres para ayudarles en todos los grandes retos que, como hemos podido ver en nuestra charla, tiene por delante el sector de la reparación y el mantenimiento de vehículos.