Consejos para camperizar furgonetas sin afectar a frenos ni amortiguadores

La camperización de los vehículos está afianzándose en España, por lo que “Elige calidad, elige confianza” (ECEC) advierte de la importancia de realizarla de forma adecuada. Para ello, la iniciativa compuesta por fabricantes de componentes de primer nivel adheridos a Sernauto, ha consultado con los jefes de taller Javier Aparicio y Javier González, colaboradores de la iniciativa, quienes aconsejan no hacerla “por libre si no se tienen conocimientos”, ya que la camperización de una furgoneta puede afectar al correcto funcionamiento de componentes como frenos o amortiguadores, comprometiendo la seguridad en la conducción, así como generar cortocircuitos, incendios o explosiones.

Sobre el daño que puede causar en frenos y amortiguadores, Javier Aparicio, jefe de taller en Motorspeed (Burgos), señala que “existen riesgos dependiendo del tipo de camperización y del peso que vayamos a añadir al vehículo, que nunca debe superar el peso máximo autorizado que figura en la ficha técnica del vehículo”. Matiza Javier González, jefe de taller en El Paraíso Car Service (Madrid), que “en el caso de furgonetas, por ejemplo, con capacidad para nueve pasajeros este riesgo no se suele dar, ya que son vehículos que vienen con suspensiones preparadas para soportar el peso de nueve personas, difícil de superar con el peso de muebles y depósitos de agua”. En cambio, si se va a realizar una camperización voluminosa en una furgoneta tipo ranchera o un 4x4, sí se deberían reforzar la suspensión y los frenos.

Acudir al profesional

Aparicio señala que, para evitar riesgos, “habría que poner frenos de mayor diámetro y amortiguadores con mayor tarado, para más peso, asegurándonos de que el peso total, incluyendo pasajeros y equipaje, no supere la masa máxima establecida por el fabricante”.

En cuanto a la electricidad, González afirma que “es importante tener nociones de electricidad, colocar un desconectador, instalar fusibles en cada nuevo ramal de cableado y asegurarse de que la sección de cable sea adecuada al amperaje que vamos a necesitar, puesto que, si no calculamos bien la sección de cable, podemos hacer que el cable se recaliente, pudiendo ocasionar un incendio”. Y apunta un riesgo más, “si lo haces tú, puede que, al manipular la electricidad del coche, estropees un elemento electrónico que pueda ser costoso”.

De ahí, la necesidad de siempre acudir a los profesionales para realizar este tipo de adaptaciones. Además, explica que “lo más recomendable es realizar un proyecto de la mano de un electricista, luego acudir a la ITV, abonar la modificación y homologar el cambio. Otra opción sería acudir a una empresa de camperización, que realizaría la instalación y se encargaría también de las homologaciones”. Otra alternativa que no requiere homologación, apunta el jefe de taller de El Paraíso Car Service, es, en lugar de realizar una instalación, “hacerse con una especie de power bank gigante, del que ‘tirar’ para todo lo que sea un castigo eléctrico, sin conectar a la batería del coche, que es lo que no deberíamos hacer nunca, pues la batería, un tiempo, lo puede aguantar, pero no demasiado, conllevando el riesgo de que se agote en el momento más inoportuno”.

Labores de fontanería

Respecto a la fontanería, Aparicio recomienda “asegurarnos de que los depósitos de agua que vayamos a utilizar sean completamente estancos y que permanezcan inmóviles ante movimientos bruscos, ya que en fuertes frenadas pueden moverse y derramar agua”, mientras que, en cuestión de gas, si se realiza una instalación fija, solo una opción: acudir una empresa autorizada para su instalación, ya que “de lo contrario, no se podrá homologar ni pasar la ITV, además de los importantes riesgos que conlleva hacerlo por nuestra cuenta, pues pueden producirse escapes de gas, lo que puede provocar problemas graves, como sufrir un incendio, la inhalación de gases o una explosión”.

Para el panelado, señalan que “hay que asegurar bien los paneles y los aislamientos para que no se puedan desmontar con baches y frenadas y cerciorarse de que todo esté bien fijado, para evitar ruidos en carretera; y en el caso de instalar claraboyas, tener en cuenta los pilares de la carrocería, ya que no se puede cortar ningún pilar de refuerzo y solo se debe cortar donde haya chapa lisa, asegurándose de sellarlo bien para evitar filtraciones de agua”.

Los jefes de taller colaboradores de ECEC concluyen enumerando todo lo necesario para la homologación de la furgoneta una vez camperizada: ficha técnica, permiso de circulación, medidas de la furgoneta, medida de la altura del suelo a todas las luces, peso en vacío, fotos de la instalación de todo y marcado CE de claraboyas. Y si hay instalación de gas, certificado de instalación por un profesional. Además, en ocasiones, dependiendo de la instalación de fontanería también se precisará el certificado de instalación por un profesional.