Los distribuidores de recambios crecerán el 13% y los proveedores el 16% en 2021

"En comparación con el 2020, los datos serán positivos; con el 2019 serán negativos". Esa es la buena y mala noticia, en la misma frase, que el CEO de Gipa, Fernando López, ofreció durante la presentación en el XXXIII Congreso de Anacera de los últimos datos recopilados por el Observatorio de la Posventa, realizado en colaboración con Sernauto y Ancera.

Así, la actividad de los fabricantes cerrará 2021 con un crecimiento del 16%, tras haber tenido un primer trimestre bueno (+12%), un segundo espectacular (+44%) y con unas previsiones de crecer el 7% en el tercer trimestre para acabar en igualdad con respecto a 2020 en el cuarto. Una tendencia de más a menos que viene provocada, como explicaría después Benito Tesier, presidente de la Comisión de Recambios de Sernauto, por la "tormenta perfecta" de la industria de la automoción provocado fundamentalmente por la escasez de materias primas, el aumento de los precios y los problemas de suministro a nivel mundial.

Más estable, aunque con menos crecimiento a final de año se prevé el panorama para las empresas de distribución de recambios. En concreto, finalizarán 2021 con un crecimiento del 13%, tras elevar las ventas el 8% en el primer trimestre, el 33% en el segundo y reducir las ventas el 6% y el 4%, en el tercer y cuatro trimestre del año.

"La fiesta de la recuperación no está siendo igual para todos. Muchas empresas están por debajo de la media. Hay empresas que todavía no están recuperando lo de 2019, no es homogénea. Hay diferentes velocidades", explicó Fernando López, quien ya prevé recuperar las cifras prepandemia para inicios de 2022, especialmente para la distribución, cuyo panorama a corto plazo no tiene tanta incertidumbre como el de los proveedores, pero que también tiene retos como el suministro, para no fallar a los talleres, la falta de stock, la gestión adecuada de las subidas de precio y mantener los márgenes.

Cifras positivas todas ellas, que evidencian la fortaleza y resiliencia del sector de la posventa, pero que también se demuestran con otros problemas que sí han tenido otros sectores, como el de liquidez o el desempleo. "El sector ha mantenido su estructura de empleados, es una buena noticia. No se van a necesitar reajustes", aseguró López sobre la encuesta del observatorio, según la cual apenas el 5% de proveedores y el 15% de recambistas han realizado despidos definitivos. Y en cuanto a liquidez, "el sector de la posventa no está sufriendo problemas de liquidez que lleven a impagos o retrasos en los cobros. Los estados financieros están más o menos controlados", concluyó López.