Liqui Moly presenta su nueva línea de aditivos para camionetas
Electromecánica
Con la serie Truck, la enseña afirma que soluciona un problema muy extendido: la pérdida de potencia progresiva.
La marca Liqui Moly ha desarrollado una nueva línea de aditivos específica para camionetas con el objetivo, explica la firma, de que el motor no pierda fuerza y se evite la pérdida de potencia progresiva.
De esta forma, la serie Truck, apunta la enseña, trata este problema cuyo origen se encuentra en la acumulación de sedimentos en el interior del motor, lo cual empeora la combustión, porque evita que el combustible se pulverice de un modo correcto.
Su consecuencia es la mencionada pérdida de potencia, un mayor consumo de combustible y más sedimentos, lo que acaba convirtiéndose en un círculo vicioso del que el conductor no se percata.
La firma asegura que los cinco aditivos para gasolina, diésel y aceite de la serie Truck logran que los motores se mantengan fuertes. En el caso del Truck Series Complete Diesel System Cleaner, este elimina los sedimentos del sistema de combustible y la cámara de combustión.
No obstante, Liqui Moly aconseja que sus aplicaciones sean distanciadas, por ejemplo, con cada cambio de aceite, o cuando aparezcan problemas derivados de la sedimentación (si el motor no funciona bien, no desarrolla toda su potencia o despide nubes de humo).
Para el uso continuado, la firma indica que es más adecuado el Truck Series Diesel Performance and Protectant, que acaba con los sedimentos y evita que se vuelvan a formar, además de aumentar el índice de cetano.
Su homólogo para motores de gasolina es el Truck Series Complete Fuel Cleaner. La enseña subraya que gracias a él, el motor funcionará más suave y el consumo disminuirá. Además, asegura que cuantos más años y kilometraje tenga la furgoneta, más se notará el efecto de los aditivos. Asimismo, indica que los 500 ml de las latas están pensados para el depósito de las camionetas y basta con echar una de estas latas cada 2.000 km.
El cuarto aditivo de la serie Truck es el DPF Protector, adecuado para camionetas que realizan desplazamientos cortos o urbanos y su filtro de partículas diésel no alcanza la temperatura necesaria para llevar a cabo la regeneración automática. Como consecuencia, el filtro se atasca de forma prematura. El DPF Protector, explica la compañía, baja la temperatura requerida para la regeneración automática, de manera que el filtro se mantiene despejado.
Por último, el Oil Treatment contiene partículas de MoS2 que actúan como lubricante sólido, proporcionando protección contra el desgaste, algo que es crucial en el arranque, cuando el aceite no ha alcanzado aún todos los rincones del motor y las superficies de metal rozan, así como en circunstancias en las que se solicita el motor en extremo.
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