El clima negativo sobre el automóvil puede cronificar la caída de las matriculaciones, alerta Faconauto
La incertidumbre estaría poniendo en peligro la buena marcha de la automoción nacional y el empleo.
La patronal de los concesionarios Faconauto ha valorado el borrador de la futura ley de cambio climático y transición energética que se ha conocido hoy. Y lo ha hecho advirtiendo de que el clima negativo que rodea a la automoción en nuestro país desde hace meses puede convertir en estructural la actual caída de las matriculaciones.
Faconauto ha indicado que las ventas de coches están cayendo un 22,4% en turismos y comerciales en lo que va de noviembre. Y relaciona esta caída principalmente con el ambiente negativo alrededor del automóvil. De confirmarse un descenso en las matriculaciones durante este mes, habría ya un trimestre completo de caídas, lo que hablaría de una debilidad real del mercado.
Según la patronal, propuestas como las que hoy ha planteado el Gobierno o la profunda crisis del diésel generan incertidumbre entre los compradores, que no saben qué coche comprarse ni cuándo, e impactan ya en todo el sector. La automoción y el comercio son sensibles a la incertidumbre y, como consecuencia, el mercado está entrando en una dinámica negativa y preocupante, no vinculada ya a causas puntuales, sino a problemas más profundos.
Con esto, según Faconauto, se está consiguiendo "poner en peligro la buena marcha de la automoción nacional, además en un momento crucial, de transformación y de cambio".
La patronal valora positivamente la puesta en marcha del Consejo Estratégico de la Automoción, auspiciado por los Ministerios de Industria y de Transición Ecológica, pero le resulta difícil entender que se haya lanzado a la opinión pública el borrador de la ley de cambio climático y transición energética sin haberlo debatido previamente en dicho Consejo.
Pese a que Faconauto comparte los objetivos de protección del medioambiente, considera que se pueden encontrar otras fórmulas que no pasen por la prohibición permanente, sino por una ampliación más rápida de la oferta de vehículos de bajas emisiones, asequibles para la mayor parte de la ciudadanía. De esta manera, no se pondría en riesgo, a corto y medio plazo, el empleo ni la viabilidad del sector.
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