"Es incomprensible que gente que necesita trabajar, no nos vea como una salida de futuro"

La escasez de mano de obra continúa alarmando en el sector. La cifra más reciente es la relativa a los concesionarios: Faltan 8.000 profesionales, según dio a conocer la presidenta de esta patronal, Marta Blázquez, durante el VI Observatorio de la Posventa Oficial.

La situación en los talleres no es ni mucho menos mejor. En un artículo publicado en Economía Digital, el presidente de Ganvam y de la Asociación de Talleres de Reparación de Vehículos de la Provincia de Valencia (Fevauto), Raúl Palacios, ha alertado de la preocupante situación de los talleres de la Comunidad Valenciana, advirtiendo además del "declive como sector".

No se trata de escasez de profesionales como tal, "la necesidad de contar con personal cualificado en los talleres, ya que debemos formarnos continuamente, y más ahora ante los nuevos modelos de movilidad que ya vemos en las carreteras por donde circulamos", expresa Palacios.

"¡Trabajo no nos falta! Lo que sí que necesitamos es mano de obra, pero no la encontramos. Y lo incomprensible es que, aun habiendo gente que necesita trabajar, no nos ven como una salida laboral de futuro", asegura.

Un "recambio generacional"

"Somos un sector que envejece que requiere de un “recambio generacional”. Probablemente no seamos lo suficientemente atractivos para el talento joven. Pero debemos insistir en que ya no somos aquellos talleres sucios de hace décadas", mantiene en el artículo.

Entre esos problemas que inciden en ser o no atractivos, Palacios se refiere a uno concreto: la economía sumergida. "Proliferan los talleres alegales sin las licencias correspondientes, que no cumplen ninguna normativa industrial ni medio ambiental, donde se emplean recambios y maquinaria poco fiables y de dudosa procedencia en las reparaciones y sustituciones", defiende. "Acudir a un taller clandestino no es más barato, porque sus consecuencias salen caras", señala.

En su artículo, Palacios enumera los problemas por los que cree que el sector está en peligro. Uno de esos problemas es la relación con las aseguradoras, quienes "echan un pulso a nuestra actividad".

El pulso con las aseguradoras

"¿Debemos acaso los talleres asumir la guerra de precios de las aseguradoras para que aumenten su cartera de clientes a costa de pólizas excesivamente baratas que no cubren el coste real de las reparaciones?", se pregunta.

Algo que desde los talleres tienen clara la respuesta. "Nuestro cometido no es regatear todos los días por cada peritación para que la compañía de seguros pague correctamente el coste de cada reparación, ni luchar contra talleres alegales, sino trabajar por un bien común que, como decía al principio, es garantizar la seguridad de las personas y asegurar puestos de trabajo para las futuras generaciones", manifiesta.

Son estos los motivos por los que peligra la viabilidad de los casi 2.000 talleres de la Comunidad Valenciana, que generan 45.000 empleos directos.