Se hizo mecánico para huir de los libros... y estudió más que un notario
De pensar que la profesión de mecánico no requería estudiar, a estudiar más que un notario. Este es un resumen de la trayectoria de Manuel Bertolín, gerente del concesionario BMW Bertolín de Valencia, quien ha participado en los Encuentros LP, organizados por el diario Las Provincias. Bertolín es el concesionario BMW más antiguo de Europa, a punto de cumplir 50 años. Su gerente recuerda que su pasión por los vehículos comenzó cuando tenía 13 o 14 años. “Yo no quería estudiar, por eso me hice mecánico”, recuerda Manuel Bertolín, sin embargo, “después he tenido que estudiar más que un notario”. Estudio y trabajo constante para poder mejorar lo que venía de fábrica: “esa era mi pesadilla y muchas veces lo lograba. Siempre hay que cuestionar los métodos tradicionales y buscar nuevas formas de trabajar”, dijo.
También tuvo palabras para el equipo de profesionales. “Tengo un equipo que es un sueño”, dijo, pero hay que escucharles para mejorar los procesos. “Preguntando he hecho cosas muy buenas: ¿a qué distancia quieres la luz?, ¿dónde te viene mejor tener el banco?”. Esa es la manera de mejorar día a día el trabajo, explica Manuel Bertolón.
En cuanto a la formación, Bertolín explicó que no todos los empleados pueden hacer los mismos cursos: “hay que saber hasta dónde llega cada uno para que ocupe el puesto más adecuado”. Por eso lamenta que haya muchos talleres cuyos empleados “tienen cero formación y no saben si hay que cambiar el líquido de frenos al año o a los dos años”. Vendría bien que el Gobierno fijara hasta dónde puede llegar cada taller, con una distribución de tareas por categorías de conocimientos, concluyó Bertolín.
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