Hacienda pide el IVA no aplicado a las rebajas por financiación de los concesionarios

Financiar un vehículo a través del concesionario de coches resulta para los usuarios, actualmente, más barato y cómodo que pedir un préstamo al banco. La clave es conseguir una buena rebaja en el precio final del vehículo (promofinance), la cual suele oscilar entre los 2.000 y 6.000 euros por operación.

Sobre ese descuento, el ministerio de Hacienda está pidiendo cuentas de los últimos cuatro años a los establecimientos, según publica La Voz de Galicia.

“La investigación se centra en el IVA no aplicado a las promociones que se ofrecen a los clientes que optan por pagar el coche a través de la financiera de la marca”, explican desde Faconauto, ya que el IVA no se ha aplicado sobre el descuento, al considerar que está ligado a una operación financiera, y la actividad crediticia, como la de los seguros, no está sujeta a este gravamen.

Sin embargo, Hacienda señala que el descuento se aplica a la compra del vehículo y no al interés del crédito sí, por lo que sí tiene que estar sujeto a IVA.

Las investigaciones de los inspectores comenzaron en septiembre del 2017 y ya se han enviado las primeras sanciones y propuestas de liquidación, las cuales están siendo recurridas al alegar que hay un vacío legal.

El ministerio de Hacienda reclama los descuentos de los últimos cuatro años, el 21 % de IVA, más intereses de demora y la sanción correspondiente, por lo que la patronal subraya que las sumas reclamadas no son menores.

En cualquier caso, los empresarios apelan a la calma, a la espera del resultado de las conversaciones que se están manteniendo con el fisco para evitar las sanciones.

En 2017, las marcas de coches a través de sus entidades o enseñas blancas con las que operan financiaron el 55% de las ventas de turismos, tal y como indica el citado medio, consiguiendo que los usuarios paguen menos por un vehículo si financia su compra que si lo paga al contado.

Estas operaciones son más ventajosas para el concesionario que para el cliente, según señalan los bancos al citado medio “porque, primero, vende un coche que produce como grupo automovilístico; segundo, el descuento al cliente lo recupera a través de los intereses del crédito, y, por último, como la financiación se hace a través de la financiera de la marca, esta entidad tituliza la deuda para sacar rentabilidad en el mercado secundario”.

Los concesionarios españoles facturaron 32.145 millones de euros en 2017, el 4,7% más que el año anterior, según Faconauto. Del total de ingresos, el 69,3% vino de las ventas de coches nuevos, el 17,4% de los usados y el 13,3 % restante lo aportó la actividad de los talleres y recambios.