De un pequeño taller de barrio a convertirse en el mejor pintor de España
Infotaller ha entrevistado a Juan José Aguirre, pintor de Badalona ganador de la última edición del Concurso Pintores Distinguidos de Automoción 2022. Con casi 20 años de experiencia, obtener este triunfo no solo supone un reconocimiento a toda su trayectoria, sino también cumplir una promesa a alguien muy importante.
Juan José Aguirre tiene 37 años y trabaja como pintor en Auto Tortosa, un pequeño taller en Badalona (Barcelona). Desde el sábado 12 de noviembre, es el flamante ganador de la cuarta edición del Concurso Pintores Distinguidos de Automoción 2022 organizado por Cañizares Piñero. "Todavía no sé dónde voy a poner el trofeo, si lo dejaré en el taller o en casa" (en el momento de escribir estas líneas, se disponía a llevarlo al taller ante las peticiones de sus compañeros de verlo).
Desde pequeño tenía claro que lo suyo eran los coches. "Son mi pasión", afirma con rotundidad a Infotaller. Terminó la E.S.O. y sin perder un segundo estudió el titulo de "Especialista en Carrocería" en el centro de estudios Monlau de Barcelona: "Empecé haciendo de todo, pero al final me decanté por pintura. Desde ahí, siempre he sido pintor, desde el primer momento que salí de la formación y no he parado". A día de hoy, acumula casi 20 años de experiencia en el sector y tal y como afirma, "me levanto para ir a trabajar, pero al final es como si no lo hiciera, porque me pagan por lo que me gusta".
"Con casi 19 años empecé en un taller de barrio, en el que estuve dos años y luego me cambié a otro pequeño. Después de 7 meses me volvieron a llamar del primero y volví y ahí estuve más de 10 años. A partir de ahí he pasado por varios sitios, como por ejemplo, el taller oficial de Línea Directa, he estado en grupo M, en Auto Almogàvers de Peugeot y ahora he acabado en otro taller pequeño, Auto Tortosa", cuenta el triunfador, que además destaca que al haber estado en diferentes sitios, ha aprendido de todos y, con ello, "las cosas buenas se van quedando".
De su extensa trayectoria recuerda con cariño un taller que estaba al lado de casa, pequeño, en el que aprendió a hacer de todo y donde empezó a hacer aerografía. Estuvo cinco años más o menos. "Me enseñaron a desmontar, a montar... recuerdo esa época con mucho cariño, fue para muy importante para mí. Es un cúmulo de cosas que te tienes que quedar para ti. De todos los sitios se aprende, ya que es un sector que se renueva mucho".
El hecho que marcó su vida
Hace dos años, tuvo que enfrentarse a la muerte por causas naturales de su padre. Algo que marcó su decisión de tomar otro rumbo laboral. "Abrí los ojos. En esta época, en la que lo pasé muy mal, decidí que no era feliz donde estaba. A partir de ahí comencé a buscar mi sitio. Al final, tienes que buscarte un lugar donde disfrutes y te valoren".
"En este mundo nunca se para. Te llaman de muchos sitios con ofertas muy buenas. Se buscan otras cosas más allá del tema económico como son la comodidad, aprender, trabajar con buenos materiales y sobre todo disfrutar. Sin olvidar, por supuesto, poder tener tiempo para la familia". Esta precisamente es solo uno de las cosas que más le gusta hacer.
Entre sus extensas aficiones está la de dibujar, "tengo dos o tres aerógrafos en casa. Me gusta pintar cascos también". Además, saca tiempo para salir con los amigos, viajar y conocer sitios nuevos, entre otras aficiones. Además de los coches, le gustan las motos (tiene una 125 cc con la que se desplaza cada día) y no descarta "comprarme una grande". En definitiva, tal y como cuenta a Infotaller, le gusta "disfrutar de la vida y vivir".
Recuperando el tema laboral, Juan José explica que "venía de trabajar en sitios en los que vas por tiempos, es decir, tienes un par de horas para reparar una pieza. Eso te dota de rapidez en el trabajo, a la vez que lo haces bien y no puedes cometer fallos. Pero también eres como un robot, al final estás ganando dinero para la empresa, pero no das calidad. Un cliente quiere que quede bien, que no corras, por eso busqué un taller más pequeño donde pudiera ser yo".
De hecho, uno de las primeras personas en las que pensó cuando escuchó su nombre como triunfador del certamen fue su padre, ya que este galardón suponía cumplir una promesa. "Llevo unos años en el grupo y un día le dije a mi padre: "Papá, un año me presentaré al concurso y lo ganaré. Mi padre siempre me decía que era especial. Al final lo he podido cumplir. Son muchos sentimientos encontrados y mucha emoción".
Durante este momento tan emocionante, también pudo disfrutar de la presencia de su mujer, con la que lleva 22 años, y de su hija, de 7 años, que vivieron en directo cómo se proclamaba ganador y que le han animado a continuar en la misma línea: "Me han dicho que me lo merezco, que están muy orgullosos de mi y que nunca vaya a menos, siempre a más. Sin mi mujer no sería posible". Además de ellas, su familia la completa un perro de raza chiguagua.
Nervios a flor de piel
"Aunque uno siempre va con la ilusión de por lo menos quedar en el podio, no me esperaba ganar porque los 12 compañeros son una pasada. Les miraba al terminar las pruebas y pensaba: 'es que son buenísimos'. Lógicamente al final tiene que ganar uno".
Y es que no era la primera vez para Juan José Aguirre, ya que hace unos años se presentó al concurso pero quedó el número 13. Pero no desistió y gracias a eso, hoy "todavía estoy en las nubes". Quien la sigue la consigue.
El galardón supone para este pintor de Badalona "un reconocimiento al esfuerzo que he hecho durante toda la vida laboral y una motivación para seguir e intentar superarme cada día para hacer las cosas mucho mejor".
Y aunque cuenta a Infotaller que iba tranquilo, ya que solo pensaba en disfrutar de la experiencia, "antes de empezar cada prueba tienes mucho nervios. Hay mucha gente del mundo de la automoción que entienden mucho y te están observando, lo que presiona mucho. Estás temblando al principio pero luego ya te centras en lo que estás haciendo. Solo pensaba en "tengo que hacerlo bien y tiene que salir bien".
Y el año que viene repite, pero no como concursante, sino como jurado: "Me hubiera gustado presentarme otra vez, pero a la siguiente temporada me presentaré sin duda. El objetivo no es presentarte para ganar, sino para pasar un día tan bueno como el que pasé y compartir vivencias con los demás. Somos como una familia al final. Yo no veo rivales, los veo como compañeros de oficio e incluso amigos. Eso es lo que me llevo, las amistades que haces durante el concurso".
Para concluir, este pintor barcelonés nos cuenta cuál es su objetivo más inmediato: "Seguir mejorando. Estoy muy bien donde estoy, pero nunca se sabe lo que puede pasar. El abanico es muy grande, nunca cierro puertas a nadie".
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