Causas, prevención y reparación de arañazos en la pintura por cepillos de lavado

En el momento de limpiar un vehículo, el uso de cepillos demasiado gruesos o sucios, tanto los del lavado manual como los de los túneles de lavado, puede conllevar que salgan arañazos finos y alargados en la pintura. Lo mismo que hacer un prelavado demasiado corto o con una cantidad de agua insuficiente, o lavar demasiado pronto una superficie recién repintada.

Respecto a esto último, los técnicos de Glasurit, a través de su herramienta de Pintura ABC, explican que la pintura recién aplicada es menos resistente a los arañazos si no se seca durante el tiempo suficiente o cuando se aplican demasiadas manos o se usa una cantidad incorrecta de endurecedor.

De este modo, los arañazos aparecen a menudo en líneas paralelas y son especialmente visibles en colores oscuros. Además, hacen que la superficie del vehículo presente menos brillo en general y un tono grisáceo.

Para prevenir que aparezcan arañazos en la pintura, Glasurit recomienda utilizar cepillos de lavado apropiados, limpiar concienzudamente el vehículo con abundante agua y evitar lavar el vehículo demasiado pronto después de que se le haya aplicado un acabado. Lo ideal siempre es respetar las recomendaciones de espesores de película, tiempos de secado y cantidades de endurecedor.

Reparación de arañazos en la pintura

Pulir la superficie afectada con Glasurit 562-1602, compuesto de pulido fino, y dar el acabado con cualquier pulimento estándar de alto brillo sería, según los técnicos del fabricante, la solución para reparar los arañazos.

Si bien, en su opinión prevenir los daños causados por los cepillos de lavado “no es fácil”, en los casos de vehículos que salen de fábrica con laca original resistente a los arañazos recomiendan reparar su acabado con Glasurit 923-447 Laca HS VOC resistente a los arañazos.