Sustituir la bomba de agua no es suficiente
Los sistemas de refrigeración y las bombas de agua funcionan con una exigencia cada vez mayor, lo cual no es compatible con facilitar un mantenimiento del sistema. Cambiar una bomba de agua sin limpiar el circuito es una opción cada vez más arriesgada.
La suciedad e impurezas que se acumulan en el sistema de refrigeración tienen efectos graves, como el fallo de la bomba de agua. De esta forma, las impurezas, la abrasión y la suciedad en el circuito de refrigeración disparan el desgaste de la bomba de agua. Además, las partículas atacan el sello del eje giratorio. La sustitución de la bomba de agua no elimina la causa del problema y la suciedad del líquido refrigerante también va a desgastar la nueva bomba, que tendrá una vida útil muy inferior a la normal.
Son los propios fabricantes de las bombas de agua quienes recomiendan la limpieza del sistema y no hacerlo repercute a menudo en la no aceptación de la garantía de una bomba de agua porque fácilmente, a través de pruebas de laboratorio, el fabricante puede comprobar si la limpieza de todo el circuito se hizo o no.
Es como usar ropa limpia sin ducharse. Por eso es tan importante limpiar el sistema de refrigeración después de cada trabajo realizado en el radiador. Y ese proceso es simple y barato gracias al limpiador para radiador Kühler Reiniger de Liqui Moly. Solo hay que añadir el Kühler Reiniger al líquido de refrigeración, se enciende la calefacción y se deja el motor en marcha. Las sustancias activas disuelven así sedimentos, lodo y suciedad que, entre 10 y 30 minutos, se evacuan junto con el líquido refrigerante usado y posteriormente el sistema se enjuaga con agua. El sistema queda entonces limpio, pudiendo alcanzar su rendimiento máximo con la nueva bomba de agua y líquido refrigerante. Además, la vida útil de la bomba aumenta y evita problemas en el sistema de refrigeración.
El Kühler Reiniger debe utilizarse como mantenimiento, especialmente en cada cambio de bomba de agua. De lo contrario, una bomba de agua que podría durar 50.000 kilómetros puede aguantar sólo 15.000 kilómetros o incluso tener un problema poco tiempo después de ser montada. Asociado a la falta de limpieza del circuito está un mal anticongelante. Juntos pueden crear un problema inmediato en la bomba de agua y también un problema con la garantía del fabricante.
Entre sus ventajas destacan la eliminación de los residuos de aceites y grasas, la transformación química de caliza, la no incorporación de ácidos ni soluciones agresivas, la compatibilidad con gomas, plásticos y todos los anticongelantes, la protección de la bomba y la garantía de los servicios de mantenimiento.
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