Los talleres de Ourense se enfrentan a una serie de desafíos que han llevado a una acumulación de trabajo y largas listas de espera para sus clientes. La falta de mano de obra calificada, la dificultad para encontrar repuestos y el aumento de la antigüedad de los vehículos son problemas recurrentes que afectan a la industria.

El presidente de Atave, Ricardo Borrajo, destaca la falta de nuevos talentos en el sector, ya que los jóvenes muestran poco interés en dedicarse al mundo del automóvil. "Tenemos por delante un arduo trabajo para recuperar la pasión por el mundo del automóvil", afirma al medio La Región.

No hay personal ni materiales

Además, la escasez de personal cualificado se ve agravada por las deficiencias en la formación práctica de los jóvenes que salen de la Formación Profesional. Aunque hay demanda de empleo, muchos carecen de la experiencia práctica necesaria para trabajar en los talleres, lo que dificulta aún más la contratación.

A estos desafíos se suma la dificultad para encontrar repuestos, lo que influye en los precios y los tiempos de espera para los clientes.

La falta de stock y la escasez de piezas en el mercado hacen que los talleres tengan que programar citas con mucha anticipación y enfrentarse a largos períodos de espera para completar las reparaciones. "Estamos dando cita para más adelante. Los cambios de ruedas se pueden hacer en horas, pero el mantenimiento puede alargarse un día o dos", asegura.

Por otro lado, el aumento de la antigüedad del parque automotor español ha generado más trabajo para los talleres, ya que los conductores optan por mantener sus vehículos por más tiempo. Esta tendencia ha llevado a un aumento en las visitas al taller y a una mayor demanda de servicios de mantenimiento y reparación.

Es importante ayudar a los futuros profesionales

En respuesta a estos desafíos, el presidente de la Asociación de Talleres de Ourense destaca al medio de comunicación local la importancia de la colaboración con los estudiantes de Formación Profesional, especialmente en la modalidad dual. Reconoce la necesidad de ofrecer más oportunidades de práctica en los talleres para complementar la formación teórica de los estudiantes y prepararlos mejor para el mercado laboral.

"Nadie tiene la varita mágica para decir que el año que viene tengamos tantos profesionales formados. No nos queda más remedio que implicarnos. Sí que sería necesario un pequeño ajuste, sobre todo por los costes que tiene para las empresas, porque somos nosotros los que estamos formando a nuevos trabajadores y asumiendo los costes”, aconseja.