Cómo realizar un plan de prevención de riesgos

La prevención de riesgos laborales en el taller mecánico es uno de los principales aspectos que deben cuidar los negocios del sector. “No estamos ante una cuestión únicamente de obligatoriedad, sino de necesidad”, apunta Serca en un artículo.

Mantener un entorno cien por cien seguro genera entre los empleados genera sensación de confortabilidad, lo que desemboca en un mejor rendimiento en su trabajo. Asimismo, esto será percibido por el cliente, que captará el establecimiento como un centro de alta profesionalidad.

En un taller, la prevención de riesgos tiene dos objetivos. Por un lado, mejorar las condiciones laborales, tanto en formación como en herramientas para la ejecución de los procesos. Por otro, reducir los accidentes y las incidencias que frenen o dificulten el trabajo.

Para ello, el grupo de distribución subraya que se debe desarrollar un plan de “buenas prácticas”, además de tener presentes las obligaciones legales, en el que se apliquen todos los aspectos requeridos para obtener unos resultados óptimos.

Con el fin de aplicar esas “buenas prácticas”, tienen que establecerse protocolos de análisis y el estudio de posibles incidencias para, posteriormente, acudir a soluciones prácticas.

Asimismo, es importante tener a un responsable encargado de supervisar ciertas áreas de trabajo, que garantice unos procesos correctos, y establecer sistemas de calidad para alcanzar los objetivos marcados.

Además, hay una serie de puntos que son fundamentales. Entre ellos destaca el asegurar que siempre haya suficiente personal cualificado acorde con la carga de trabajo, así como que las instalaciones, equipamiento y material sean los correctos.

Serca, recuerda que es importante asegurar que todos los trabajadores entiendan perfectamente qué se ha de hacer en cada situación, para lo cual es básico realizar cursos de reciclaje y formación interna.

Por último, no hay que olvidar el cumplimiento de las normativas de salud y seguridad, además de proporcionar el manual de buenas prácticas y los procedimientos normalizados de trabajo a todo el personal.